Romero también adoptó la decisión de aceptar las dimisiones de un grupo de consejeros provinciales que desconoce su autoridad dentro del partido y que, en su momento, dimitieron para restar legitimidad a las decisiones del órgano ejecutivo permanente del PJ.Para empezar, Romero resolvió -aún no se se sabe bien- aceptar la dimisión de Urtubey por los motivos que éste expone en su carta o, bien, cesarlo por incumplimiento de sus deberes de consejero, y, más concretamente, "por ausencias reiteradas" a las reuniones del cuerpo. El "abandónico" senador respondió de una forma más bien contundente al "ausentiásico" gobernador, en lo que ya se considera una acusación mutua de dejación de las obligaciones partidarias de cada uno.
También fueron aceptadas las renuncias (o fueron cesados, según se mire) el presidente de la Cámara de Diputados Manuel Santiago Godoy y los consejeros Daniel Isa, Patricia Solá y Pedro Cruz, así como de los suplentes Rubén Fortuny, Eduardo Barrionuevo, Silvia Varg, Clelia Avalos, Rosa Quiroga y Vicente Narváez.
Este movimiento supone la incorporación al Consejo Provincial de los suplentes Ana Maria Acuña, Amado Chiban y Lucrecia Ovejero.
En declaraciones a FM Pacífico de la ciudad de Salta, Romero dijo que su sector va "a recuperar la militancia y la calle, y con ello vamos a recuperar el gobierno provincial y el gobierno municipal. Este sector del peronismo va a poner sus propios candidatos para que compitan con Urtubey y con Isa". Dijo también que aún es prematuro hablar de su candidatura a gobernador para 2011, pero lo que es seguro es que competirá con el gobernador Urtubey por la presidencia del partido, cuando sea el momento, y si el gobernador se presenta.