Saravia cuestiona al Tribunal de Cuentas Municipal y exige su reforma

El candidato a concejal por el “Acuerdo Cívico y Social” y dirigente radical, Carlos Humberto Saravia, consideró que es necesario introducir modificaciones a las normas que rigen el Tribunal de Cuentas Municipal. Carlos Humberto Saravia, dirigente de la UCR de Salta“Es indudable que un órgano de control que se entera de los hechos de corrupción por los medios de prensa se encuentra en crisis. En el mejor de los casos podría decirse que es negligente, pero también podríamos pensar que algunos de sus miembros son cómplices de la gestión de Miguel Isa”, afirma de forma contudente el dirigente radical.

Dice también Saravia que, en resonantes casos que han motivado la apertura de investigaciones judiciales a funcionarios del Departamento Ejecutivo Municipal, la actuación de este órgano de control no detectó irregularidades y los tres vocales que lo integran profesan un bajo perfil. Actualmente sus autoridades son los contadores Enrique Erdmann y Narciso Ramón Gallo, de extracción justicialista, y el abogado Nicolás Jovanovics, del Partido Renovador de Salta.

Recuerda del candidato a concejal que, el año pasado, el Comité Provincial de la UCR denunció la existencia de un fraude millonario en la permuta de inmuebles que culminó con la construcción del Centro Cívico Municipal. La Fiscal Emma Puente promovió acción penal y actualmente la causa tiene medidas pendientes que podrían comprometer a funcionarios de Isa.

Lo mismo ha ocurrido hace dos semanas cuando se abrió una pesquisa para establecer si existió delito por el direccionamiento de la concesión de licencias de taxis y remises, afirma Saravia. "Ninguno de los decretos fue observado por el Tribunal de Cuentas a pesar de irregularidades notorias".

“El control de la hacienda pública exige independencia política del Intendente, que es la persona a quien debe controlar. La reforma de la Ordenanza 5552 debe contener cláusulas que encomienden el predominio de la oposición en la conformación de sus vocalías. Esta postura la enarbola la UCR desde hace décadas y está plasmado en la reforma constitucional de 1994 que asignó la presidencia de la Auditoría General de la Nación a la oposición. También debemos avanzar al control concomitante y de gestión. Los sumarios investigativos se inician cuando los hechos están consumados y el funcionario se fue a su casa”, sostiene el dirigente radical.

Está previsto que el Tribunal de Cuentas sea controlado por un funcionario designado por el Concejo Deliberante. Al respecto Saravia dijo desconocer quien tiene esa responsabilidad actualmente y exigió que el órgano legislativo ponga el acento en esta temática. “Siempre se cubrió este cargo con complacientes que iban a arquear los gastos de caja chica del Tribunal. Ahora creo que no está cubierto y esto devela una despreocupación inadmisible” finalizó.