
Además de un sustantivo apoyo popular, Urtubey -que está enrolado en las filas del kirchnerismo- llega al gobierno de Salta con el apoyo explícito de la nueva presidenta de la Nación Cristina Fernández de Kirchner y con la promesa de mejorar las relaciones entre la administración provincial y el gobierno nacional, que atravesaron sus momentos más bajos durante los últimos cuatro años.
Tras el juramento, a las 8.15 está previsto que Urtubey reciba de manos de Romero el bastón de mando y que pronuncie su primer mensaje como gobernador a la Legislatura. Luego, el gobernador se trasladará a la Plaza 9 de Julio en donde está previsto que reciba el juramento de sus ministros en un acto que se realizará en frente al Cabildo Histórico.
La composición del gabinete de Urtubey augura cambios en la dirección de las principales políticas del Estado. El nuevo gobernador tiene por delante la singular tarea de desmontar el sistema clientelar-oligárquico en que estuvieron basadas las adhesiones al anterior gobierno, así como la más asequible tarea de reconducir los gestos y el ceremonial de Estado por el camino de la austeridad republicana.
En el terreno económico social Urtubey promete dejar atrás una larga década de postergación de los sectores menos favorecidos invocando los valores de la igualdad y la solidaridad que fueron dejados de lado por el anterior gobierno. El nuevo mandatario promete políticas activas de inclusión social basadas en derechos y no en simpatías o adhesiones partidarias, y anuncia la utilización de los recursos del Estado -incluida la obra pública- con criterios de equidad social y transparencia.
En materia de libertades públicas, Urtubey ya ha anunciado que "gobernará para todos" y que se desmarcará rápidamente de la política de su antecesor basada en las listas negras, la negación de la oposición política, la sumisión de las organizaciones sociales libres y la represión del disenso.
Finalizado el acto de jura de los ministros, Urtubey volará a la Capital Federal en donde asistirá a otro acontecimiento histórico: el juramento como presidenta de la Nación de Cristina Fernández de Kirchner.