
Según este informe, un 27,5% de la población argentina vive en situación de pobreza, mientras que las estadísticas oficiales elaboradas por el gobierno indicaban que apenas un 3,5% a finales del año anterior.
El mismo informe sitúa el nivel de indigencia en el 5,5%, mientras que para el INDEC que solo el 3,5% de los argentinos vivía en situación de indigencia en 2013.
Según el ODSA, la diferencia entre las mediciones de su informe y las cifras oficiales del INDEC obedecen a los diferentes elementos estadísticos utilizados para calcular esta variable social, entre ellos los indicadores de ingresos y precios.
Así, mientras que el INDEC basa sus datos en la inflación oficial -cuya manipulación a la baja es sobradamente conocida a nivel internacional-, el ODSA lo hizo a través de su propia Encuesta de la Deuda Social Argentina (EDSA), que se realiza en forma periódica.
Entre los resultados del Barómetro de la Deuda Social Argentina que presentado ayer, la UCA señaló que mientras que para el INDEC las tasas de indigencia y pobreza siguieron cayendo de manera importante entre 2011 y 2013, en el caso de la indigencia la EDSA no registró cambios significativos.
Según el informe, las mayores variaciones se observaron en la tasa de pobreza, en donde para la EDSA la tendencia fue inversa, es decir, hacia un aumento de la pobreza. Entre 2011 y 2013 este aumento fue de casi tres puntos porcentuales: del 24,7% al 27,5%.