
Es sabido que estos arácnidos de hábitos subterráneos y noctámbulos proliferan en aquellos lugares faltos de higiene, en donde al amparo del calor y la humedad se reproducen con asombrosa facilidad.
Los lugares infectados de insectos y arañas son los hábitats ideales para estos activos y peligrosos cazadores, algunas de cuyas especies de alimentan también de roedores, pequeñas serpientes y lagartijas.
En su Libro de la naturaleza, el naturalista del siglo XIV Konrad von Magenberg afirmó que el alacrán ataca a los humanos solo en zonas velludas y jamás en el hueco de la mano. Otra curiosidad divulgada por Megenberg: «Si a un escorpión ahogado en aceite se le vierte vinagre bajo luz diurna, resucitará inmediatamente. Pues el aceite le atasca las aperturitas corporales, el equivalente a los poros capilares humanos. El vinagre por contra, se los reabre».
Justamente, el aceite y el vinagre se alían para convertir al alacrán en un plato exquisito, como lo demuestra el chef norteamericano David George Gordon (Twitter @thebugchef), autor del libro The Eat-A-Bug Cookbook en el que deslumbra a los lectores con la demostración de cuán delicioso puede ser el sabor de las tarántulas y los escorpiones.
Los expertos recomiendan utilizar alacranes de baja toxicidad, como el escorpión emperador, y acompañar los pinchos con abundante salsa vietnamita. No en vano en este país, así como en gran parte del sudeste asiático, el alacrán frito tiene una gran implantación, no exenta de ciertos mitos, como la capacidad de incrementar la potencia masculina.
Aunque en Salta todavía los paladares no parecen especialmente preparados, la abundancia de la materia prima en ciertos barrios de la capital hacen pensar seriamente en la viabilidad de la explotación económico-culinaria de estos arácnidos de amenazantes pedipalpos y terrorífica cola curvada.
Solo hace falta un par de valientes empresarios que se animen a reemplazar el tradicional matambrito al ajillo por este sabroso plato oriental, pues la amplia publicidad del producto está garantizada estos días por un popular diario de la ciudad, que no en vano ha nacido bajo el signo zodiacal de Escorpio.