Brazalete electrónico para un hombre que quebrantó una orden de alejamiento y amenazó a su expareja en Salta

  • El juez Maximiliano Troyano Chavarría, que integra la Sala IV del Tribunal de Juicio de la ciudad de Salta ha condenado al ciudadano Carlos Sebastián Peláez a la pena de un año y seis meses de prisión de ejecución condicional.
  • Juicio penal en Salta

El juez ha declarado a Peláez culpable de diez delitos de desobediencia judicial y amenazas, en concurso real.


Entre las reglas de conducta que deberá observar el condenado como condición para no ingresar efectivamente en prisión se cuenta la de llevar un brazalete electrónico.

Peláez fue denunciado por su expareja, con la que había convivido siete años y de la que se separó hace dos. La mujer, que adujo que durante la convivencia fue víctima de violencia y física a manos de Peláez, denunció ante la Policía que, pese a una orden de alejamiento dictada oportunamente en su contra, el hombre se mudó a vivir cerca de su casa y que permanentemente la sigue y la hostiga cuando ella sale de su domicilio. También ha denunciado la mujer que Peláez la amenazó con matarla e hizo lo mismo con un vecino.

En su resolución, el juez Troyano impuso al condenado la observancia de una seria de reglas de conducta durante dos años, entre las que destaca el uso de un dispositivo electrónico de localización permanente y la obligación de someterse a un programa reeducativo para agresores de villencia de género. Troyano amplía la orden de alejamiento a un radio de 500 metros de la denunciante, su grupo familiar y los lugares que ella acostumbra a frecuentar.