La Corte de Justicia de Salta ha confirmado la condena de tres años de prisión de ejecución condicional y costas que la Sala III del Tribunal de Juicio había impuesto a Daniel Leandras (47), alias “Nico”, y a su madre, Elsa Miguel (68), como responsables de un delito de estafa. La sentencia, ahora confirmada tras ser desestimado por la Corte un recurso de casación, imponía también a los condenados la obligación de fijar residencia y someterse al cuidado del Patronato de Presos y Liberados por el término de dos años, y les condenaba a pagar la cantidad de 49 mil pesos a la víctima del delito, en concepto de reparación integral por daños y perjuicios, más los intereses judiciales desde la fecha del hecho y hasta su efectivo pago.
La denuncia contra Daniel Leandras y Elsa Miguel fue formulada el día 17 de octubre de 2006 por el ciudadano Víctor Aníbal Tissera, quien expuso que en junio de aquel año había comprado en la concesionaria de Leandras y Miguel un vehículo Ford Ranger 4x4 que finalmente tuvo que devolver porque se encontraba inhibido para su venta.
Ante esta situación, la agencia vendedora propuso el cambio por otro vehículo -un Ford Explorer XLT- para lo cual el vendedor entregó el vehículo que había comprado anteriormente, más dinero en efectivo.
El segundo vehículo fue entregado al comprador cuatro meses después de que éste desembolsara el precio, pese a las promesas de los vendedores de entregarlo en un plazo de 15 días. Después de la entrega, el comprador advirtió que al vehículo le faltaba la caja de cambios, un pedal y el equipo de gas, y que también se hallaba inhibido para la venta por encontrarse afectado a un concurso preventivo de acreedores.