
Según el propio despacho gubernamental, la medida fue adoptada por el Gobernador «ante las interpretaciones suscitadas en relación al memorándum 08/20 del Ministerio de Salud Pública».
Ha sido precisamente la ministra Josefina Medrano quien ha debido salir a explicar que el «espíritu» de su memo tenía por la finalidad la de «resguardar la transparencia, cierta y correcta de la misma».
Pero no ha podido ser.
Las interpretaciones -más bien destructivas- y «la necesidad de aclarar las mismas» han movido a Sáenz a dar de baja a ese instrumento, que ya no tiene ningún valor administrativo, si es que alguna vez lo tuvo.
En pública comparecencia, Medrano ha dicho que se trataba de «una herramienta interna de ayuda al manejo responsable y legítimo de los datos que surgen en el Ministerio de Salud, a fin de garantizar el derecho de acceso público de la información de la misma cartera».