
La decisión, adoptada por el Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología desestima la posibilidad de que las vacaciones invernales dieran comienzo una semana más tarde, según lo había solicitado la Cámara de Senadores de la Provincia, en una declaración aprobada por unanimidad.
Como se recordará, la declaración senatorial, impulsada por Andrés Zottos, justificaba el cambio de las fechas de las vacaciones en la necesidad, más presunta que real, de que los niños de las escuelas asistieran masivamente a los festejos oficiales por el bicentenario de la Declaración de la Independencia argentina.
Al final, ni el argumento patriótico ni el meteorológico han tenido cabida y ha primado la sensatez en la autoridades que gobiernan la educación en Salta. Una modificación del calendario habría acarreado más problemas que soluciones, habida cuenta de que faltan apenas seis semanas para el comienzo del receso de invierno.