Debacle del kirchnerismo en las elecciones primarias celebradas en todo el país

  • El gobierno de Alberto Fernández y Cristina Kirchner ha cosechado ayer una dura derrota electoral en el conjunto del territorio nacional. La caída ha sido más notable todavía en provincias en las que había recibido fuertes apoyos en elecciones anteriores.
  • Resultados sorprendentes

Con casi la totalidad de las mesas escrutadas, el resultado más notable es que los candidatos gubernamentales perdieron en 18 provincias: Buenos Aires, Capital Federal, Chaco, Chubut, Corrientes, Córdoba, Entre Ríos, Jujuy, La Pampa, Mendoza, Misiones, Neuquén, Río Negro, Salta, Santa Cruz, Santa Fe, San Luis y Tierra del Fuego.


La marca electoral del kirchnerismo gobernante -el Frente de Todos- fue derrotado en provincias como Santa Cruz y Chaco. Pero en donde el impacto de la derrota se ha sentido con más intensidad ha sido en la Provincia de Buenos Aires, por su importancia política y demográfica. El mismo territorio que en 2019 había apuntalado el triunfo electoral de Alberto Fernández no sólo se dio vuelta, sino que entregó algunos datos inesperados hasta por los encuestadores del gobierno: el kirchnerismo perdió en 7 de las ocho secciones electorales. Y en la única que ganó, la tercera (Avellaneda, Quilmes y La Matanza, entre otros) ganó por apenas 8 puntos, cuando hace dos años en esos partidos había ganado por más de 30 puntos.

Los resultados anticipan un cambio en la relación de fuerzas del Congreso Nacional: de repetirse estos números en las elecciones generales de noviembre, Cristina Kirchner perdería la mayoría en el Senado y el oficialismo quedaría obligado a negociar su agenda con la oposición en la Cámara de Diputados.

La derrota abre varios interrogantes sobre el futuro del gobierno kirchnerista. ¿Qué harán Alberto Fernández y Cristina Kirchner a partir de mañana? ¿Cuál será el futuro de los miembros del gabinete nacional? ¿Habrá cambio de rumbo en la gestión? El grado de la derrota podría determinar la profundidad y la velocidad de los cambios se vienen, aventuraban esta noche en el oficialismo. Algunas de esas preguntas podrían empezar a contestarse esta noche si el presidente habla desde el búnker K.

“Evidentemente algo no hemos hecho bien. Esta enorme encuesta que son las primarias para nosotros son un dato que vamos a considerar y a partir de mañana vamos a trabajar para que en noviembre, cuando llegue la elección general, los argentinos y las argentinas nos acompañen”, ha dicho esta noche el presidente Alberto Fernández en su discurso de aceptación de la derrota.

La otra cara de la elección es la gran recuperación de la coalición opositora Juntos por el Cambio, que pasó de perder en 2019 a ganar las elecciones en la provincia de Buenos Aires, Capital Federal, Santa Fe, Córdoba, Entre Ríos y Mendoza, entra otras provincias. Incluso se quedó con Santa Cruz, provincia en la que gobierna Alicia Kirchner, la hermana del fallecido expresidente.

El jefe de Gobierno de la capital, Horacio Rodríguez Larreta, mentor de la precandidaturas de María Eugenia Vidal en la Capital Federal, y de Diego Santilli, en la Provincia de Buenos Aires, emerge como uno de los grandes ganadores de la elección. De repetirse estos resultados el 14 de noviembre próximo, Rodríguez Larreta quedará muy bien posicionado en la carrera por la Presidencia de la Nación en 2023.

El domingo de las Primarias deja otro dato novedoso: el avance de los liberales, especialmente en la Ciudad de Buenos Aires. Javier Milei, precandidato de “La Libertad Avanza”, sumó 13,65% de los sufragios. Y Ricardo López Murphy, desafiante de Vidal en Juntos por el Cambio, casi 11. Entre los dos, representan al 25 por ciento del electorado porteño.

Fuente: Infobae.com