
Al mismo tiempo, Valls ha anunciado que dimitirá mañana a su cargo de Primer Ministro y los medios especulan ya con el nombre del posible sucesor, o sucesora.
Valls, nacido en Barcelona en 1962 y nacionalizado francés a los 21 años, ha dicho que pondrá todo su empeño en alcanzar la presidencia de la República, un objetivo que se antoja casi imposible, si tenemos en cuenta los muy bajos índices de popularidad del gobierno que dirige.
El flamante candidato ha expresado su deseo de propiciar la reconciliación de la izquierda y de los franceses. «Constato la división de la izquierda», dijo, en el discurso con el que presentó su candidatura, «pero me sublevo contra el derrotismo». «Nos dicen que la izquierda no tiene ninguna esperanza en las elecciones presidenciales, pero nada está escrito. Nos dicen que François Fillon [el candidato de la derecha] es ya el próximo presidente, pero nada está escrito. Ser de izquierdas consiste en rechazar el determinismo», ha dicho enfáticamente el todavía Primer Ministro.
Manuel Valls decidió anunciar su candidatura en Évry, la ciudad de la periferia parisina de la que fue alcalde hasta su nombramiento como ministro del Interior, en 2012. En el salón de actos municipal, «el lugar donde me casé», y arropado por una audiencia de distintas razas «como Francia», dio el primer paso para limar asperezas con sus compañeros de partido. «Hay que reconstruir la unidad», dijo.
Los rivales
Según los sondeos previos, el chavista Jean-Luc Mélenchon y el exministro Arnaud Montebourg, que representa el sector más izquierdista dentro del socialismo, le llevan ventaja. Normalmente, las primarias del PS deberían desembocar en una segunda vuelta con Valls y Montebourg. No está nada claro que Valls pueda imponerse a Montebourg, mucho más próximo a la militancia y crítico con la gestión de Hollande.Los analistas políticos franceses dudan sin embargo que Valls consiga reconstruir la izquierda, como aspira, y no creen que cuente con el apoyo de François Hollande, a quien su Primer Ministro le dedicó esta tarde en Evry unas palabras muy cariñosas. Muchos franceses piensan que Valls ha traicionado a Hollande, presionándolo para que renunciara a repetir como candidato en 2017 y le dejara el camino libre.
Los posibles sucesores
En la próxima reunión del gobierno, el presidente Hollande deberá elegir al sucesor de Manuel Valls como Primer Ministro. Asoman seis candidatos, todos ellos ministros del actual gobierno: dos veteranos (Michel Sapin y Jean-Yves Le Drian), dos más mediáticos (Bernard Cazeneuve y Stéphane Le Foll) y dos mujeres (Najat Vallaud-Belkacem) y Marisol Touraine.Fuente: BFMTV y El Mundo