
Si bien la medida -que ha sido presentada como fruto de una «decisión política» del gobierno- nada tiene que ver con el estado civil de las personas ni con sus derechos como consumidores, en el acto presidido por Yarade han estado también presentes el Secretario de Defensa del Consumidor del gobierno y principal aliado provincial de la candidatura presidencial de Urtubey, Carlos Morello, y el director a cargo de la oficina del Registro Civil de Salta, Matías Assennato.
La presencia de estos dos funcionarios en un lugar y en una ocasión en los que no tenían nada que hacer ni aportar, revela sin esfuerzo que, más que un acto de gobierno, la ‘presentación’ de Yarade fue un descarado acto de campaña proselitista. No solo de la de Urtubey, sino también de la de Yarade.
Difícilmente se pueda caer más bajo que presentar el simple cambio de recorrido de los colectivos como una «decisión política» del gobierno. Ni en los países más atrasados del planeta a un anuncio de tan escasa importancia como un cambio de recorrido del transporte asisten en persona los más altos representantes del gobierno, y menos lo hacen ataviados con vaqueros y zapatillas, como se han presentado Yarade y sus amigos ante gente humilde, en un claro gesto demagógico.
O es que el gobierno de Urtubey está pasando realmente un muy mal momento a la hora de definir políticas de verdad (no sabe lo que en realidad es la política), o es que aquí hay gato encerrado y los salteños seguimos pagándole la campaña a unos zánganos que deberían emplear mejor su tiempo en servir a los ciudadanos y no dedicarse a pasear su imagen por los barrios pobres.
Desde ahora, cualquier acto al que asistan Morello o Assennato deberá ser sospechado de partidista. La probada ineficiencia de estos dos funcionarios en las áreas que son de su exclusiva competencia no puede ser disfrazada en ningún caso por la obsecuencia hacia la figura del Gobernador de la Provincia, o hacia la de su Jefe de Gabinete.