
“El estudio subraya en primer lugar que la comunidad global acordó en 1948 en la Declaración Universal de los Derechos Humanos, que la protección social es un derecho humano básico... Aún así, ese compromiso sigue sin cumplirse. En la actualidad sólo el 27 por ciento de la población mundial disfruta de una cobertura amplia. Para la gran mayoría, ese derecho es nulo o se cumple parcialmente”, manifestó la directora general adjunta de la OIT, Sandra Polaski, durante la presentación del informe en Ginebra.
El análisis de la OIT destaca que los países de ingresos altos están reduciendo la cobertura de esos programas y menciona el caso de la Unión Europea, donde los recortes han provocado un aumento de los índices de pobreza y afectan a 123 millones de personas, el equivalente al 24% de esa población.
Por otro lado, muchos países de ingresos medios están extendiendo estos servicios. Es el caso de Brasil que, desde el año 2009, ha incrementado la protección social a quienes ganan el salario mínimo.
La OIT alertó que la cobertura social es aún más apremiante en tiempos de incertidumbre económica e instó a las naciones a expandirla.
Fuente: Organización de las Naciones Unidas.