Residentes de la localidad salteña de Cahi manifestaron su preocupación por la contaminación del agua y la tierra que la explotación uranio puede producir. Elio Leguina, uno de los habitantes del lugar expresó que los cachenses se enteraron de la autorización del cateo en los márgenes del Río Calchaquí y en parcelas que se utilizan para el cultivo. Preocupa la cercanía con el pueblo, afirmó.
En tanto, los vecinos siguen buscando información sobre este tema y advierten que no se quedarán con los brazos cruzados ante esta situación.
Pobladores de Animaná también se acercaron y argumentaron que si bien esto va a generar trabajo, va a ser temporario, pero lo que si va a quedar para toda la vida es la contaminación del agua y la tierra.