
Esta circunstancia, añadió, impone una obligación adicional e inexcusable: dar cuenta de su patrimonio. En esto sigo el criterio que adopté en todas las ocasiones en las que me desempeñé como funcionario público. Informé en detalle sobre ella en abril de 1996, a poco de asumir el cargo de Coordinador General de Bibliotecas y Archivos de la Provincia de Salta. Lo hice entre los años 2002 y 2004 ante la Oficina Anticorrupción del Ministerio de Justicia de la Nación, durante mi desempeño en la Comisión Nacional de Bibliotecas Populares (CONABIP), y lo hago ahora, actualizando y ampliando aquella información, explicó.
En su presentación, el secretario de Cultura entregó copia de la parte principal del inventario de esta Biblioteca Privada que reúne 35.000 volúmenes, y a cuya dirección renunció el 28 de noviembre de 2007, luego de ser nominado para desempeñarse en la Secretaría de Cultura. También agregó copia del Catálogo de Libros Especiales; la Memoria de la Biblioteca que comprende los años 1968-2007; copia de las Declaraciones de Interés Municipal (2002), Provincial (2002), Académica (2005) y de la Honorable Cámara de Diputados de la Nación (2007).
En su nota el secretario de Cultura se compromete a actualizar periódicamente los datos referidos al ingreso de libros y material en otros soportes, adquiridos o recibidos en donación a la Biblioteca J. Armando Caro la que, añadió, nunca recibió apoyo oficial ni lo solicitará mientras su propietario se desempeñe como Secretario de Cultura de la Provincia de Salta.