
Tras el ya clásico y emblemático de Néstor: hay que poner la otra mejilla ante las críticas, sus palabras revelaron la auténtica esencia de tanta mística. Néstor, que reúne en su persona los cargos de de ex-presidente de la Nación, ex-presidente que va y vuelve del PJ, esposo de la PresidentA y, rumorean, presidente de la Nación en las sombras, clamó esto: el éxito de ella (en alusión a Cristina), es el éxito de la Argentina".
Estoy confundida: siempre había creído que el éxito de una Nación no podía ser el éxito de una sola persona. Dicho más claro: que el éxito de un país no puede estar supeditado al éxito de un gobernante determinado. Dicho aún más claro: que lo que realmente importante es el éxito de un país, de ese lugar donde un grupo diverso de gente nace, crece y habita; donde se hacen grandes los hijos y descansan los jubilados. No se me habría ocurrido pensar nunca que el éxito de toda la Argentina dependiera del éxito de Cristina Fernández de Kirchner. Me da miedo pensar que si la señora Fernández "fracasa (o sea, renuncia a su cargo, finaliza su mandato o se presenta a una reelección y no la gana), la Argentina pueda estar condenada al fracaso.
Como un fiel soldado, "poniendo el cuerpo" y apuntalando las palabras de Néstor, el apóstol Scioli también habló en el acto. Daniel ya "puso el cuerpo" para ir como diputado al Congreso: hace poco informó a todos que "de donde lo puso, lo retira". Ayer, - Daniel lo sabe mejor que nadie -, informó sobre los motivos por los que el gobierno nacional pone millones en las provincias: en este caso los $ 7.600 en Chubut que vino a reivindicar Néstor.
Dijo esto: "Por más voluntad que tenga un gobernador, si no hay una orientación del Gobierno Nacional, todas esas obras y esas inversiones no se pueden hacer". Por fin la verdad, se nos revela: la Constitución podrá estipular que es la gente la que vota a sus gobernadores provinciales; podrá decir también que este país es una República y que debe ser federal y democrática. Todo eso no importará si el gobierno nacional que esté de turno, se empeña en dinamitar a un gobernador y su provincia: "no habrá otra voluntad que valga salvo la de la Rosada.
Al final del acto Néstor recomendó no pelear como el perro y el gato, sino debatir por las ideas. Curiosamente el gobernador Das Neves había dicho días antes algo tremendamente parecido: Acá hay que seguir trabajando porque la confrontación para nosotros siempre pasa por las ideas, pero me gustaría que quienes tengan la oportunidad de estar junto a Kirchner le digan que mueva la chequera.
He llegado a la conclusión que el puente del amor debe ser una obra de ingeniera bien cara; seguro que se está construyendo con materiales de primera. No me cabe de otro modo en la cabeza, que todo el mundo hable de ideas pero al final siempre impere la chequera.
Continuemos pues la construcción de este "puente del amor todos unidos.
Me informan que la más reciente incorporación a esta apostólica obra serán 35 hinchas de barras. Según Marcello Mallo, ideólogo y promotor de Hinchadas Unidas Argentinas, los chicos están entusiasmados con ser kirchneristas; pasar a ser dirigentes políticos es lo que más les ha gustado. Para celebrar esta su nueva tarea política, su adhesión al proyecto, han encargado fabricar 40 banderas: el símbolo que portarán será una pelota y un pingüino.
Reconozco que soy poco creyente, pero estoy por gritar aterrada: ¡Oeeeee, oaaaaa, que la Virgen de Luján nos asista!
* Dicho todo, obviamente, de forma completamente metafórica y con el máximo respeto hacia los que sí son creyentes.