Pan cuesta arriba

Los incorregibles partidarios de la economía de mercado pondrán, seguramente, el grito en el cielo cuando se enteren de que el precio del pan en Salta no lo fija la mano invisible, sino una corporación enharinada. Por su graciosa voluntad, el kilo de pan francés costará en la provincia $4,50.
ImageSegún la Cámara de Panaderos de Salta, este es el precio que permite a los industriales hacer frente al aumento de las materias primas que se utilizan en la elaboración de las distintas variedades.

Cuidadosos de las formas, los directivos de la entidad aclararon que al tratarse de un precio sugerido, las panaderías salteñas son libres de mantener el precio anterior o seguir la sugerencia.

El propietario de una gran cadena de panaderías que fabrican un pan de buena calidad dijo que “hará un aumento selectivo”, algo que parece razonable.

Sin embargo, hay algo que los ignorantes de los principios que rigen las “artes blancas” no comprenden: Cuando el propietario de la virginal panadería dice que aumentará solamente los precios que llevan grasa, ¿hay que entender que fabrican pan sin grasa a la que reemplazan con mantequilla, con manteca o con aceite? ¿O hay algunos productos que llevan solo harina, sal y agua?

Los panaderos salteños deberían tomar una precaución (enviar con el precio anterior el pan que habrá de consumirse el jueves en General Mosconi) y elevar un ruego (que el señor G. Moreno no integre la comitiva presidencial).