
Además, se refirió a los más de 110 mil visitantes que ha tenido la página Web de la Secretaría de Cultura desde que fue habilitada en abril de 2008. En la actualidad la página alcanza un promedio de 900 visitas diarias. También remarcó que según un informe dado a conocer por el diario Iruya.com, el sitio Web de la Secretaría de Cultura fue el de mayor crecimiento de entre todas las webs salteñas en el índice de la consultora Alexa.
La revista Cultura/Región forma parte del contenido de la página Web de la Secretaría de Cultura de la Provincia: www.culturasalta.gov.ar. Reproducimos aquí las palabras de presentación de la revista realizada por el equipo de prensa de la Secretaría:
Esta revista es parte de un proyecto de prensa institucional que se ha planteado, sobre la base de un reconocimiento del objeto de un espacio oficial que en este caso es el desarrollo de políticas culturales, realizar un periodismo creativo, abierto a las tensiones y a los procesos que transita la cultura en Salta y en la región. En este sentido hemos tomado algunos riesgos si se tiene en cuenta la idea con que generalmente se maneja la comunicación oficial. Esto se puede constatar en los artículos, entrevistas, algunas críticas sobre espectáculos y en la publicación de autores no solo ajenos al ámbito de la Secretaría, sino que han cuestionado a los lineamientos de la gestión sin consultar las fuentes, sin tener datos precisos de la realidad.
Creemos que hemos abierto espacio para el diálogo y hemos callado cuando se ha enmascarado bajo la palabra crítica intereses personales y de otras índoles que no precisamente tienen que ver con la actividad y el pensamiento cultural. En todo caso hemos respondido con conceptos, apelando a la ética periodística y a un sentido real de las cosas, basados en la historia reciente y también profunda de la cultura salteña y de las ideas de la cultura. Esta revista busca precisamente consolidar estos valores, apelando a una tradición argentina de revistas públicas que han tenido una visión plural.
En este contexto resulta contrastante que la negación de la información viene de los medios y los cuestionamientos se realizan sin consultar a las fuentes, emitiendo juicios desde la falta de información. No se puede hacer cultura sin la claridad de la información, sin el respeto de las reglas escritas y no escritas, falsificando la realidad o simplemente no informando por intereses personales. Sin tener en cuenta que en este caso no se perjudica a una gestión, sino sobre todo al ciudadano que recibe esa información. La política cultural, como la política de la información ha de trazarse sobre valores.
Es el acto ético el que está en juego. Quizá en la historia del arte nunca antes hubo tal necesidad de defender la estética con la ética. Walter Bejamin en el Autor como productor pudo resolver que la tendencia literaria es la que constituye la calidad de la obra pese a la tendencia política de esa obra. Eso era posible, porque se estaba en la antesala de la suspensión del juicio, de los valores. Hoy el problema estético es muchas veces un problema ético, desplazar a la estética es de algún modo desplazar a la ética. Ser periodistas o críticos o ensayistas no nos habilita para ignorar la realidad del otro y meter a todos dentro de un copete, dentro de un marco teórico o dentro de un banner. Ser artista, tampoco nos habilita para, en nombre del arte, eludir la responsabilidad con el otro u olvidarse del otro.
Y todo esto hay que dialogarlo, abrir el juego de las ideas, y esa es la función de todo periodismo responsable y la función de una revista cultural, esa participación sobre un espacio contrapunteado para revelar nuestro análogo cultural, parafraseando a Lezama Lima.
Las revistas culturales son cuerpos textuales colectivos que dejan un registro de los proyectos político-culturales desarrollados en determinado período, y aunque su circulación es menos instantánea, está ligada al periodismo y esto le permite un doble juego entre la profundidad y la actualidad. Las revistas han sido en la historia de América Latina un espacio importante de concurrencia entre política y cultura, han aglutinado tendencias, han alumbrado escenarios, han acompañado la historia, la han fragmentado, la han reivindicado y la han creado a través de pensamientos y de hombres que sostuvieron esos pensamientos que pertenecen al inconciente estético, a un cuerpo disímil, plural y siempre actualizado.