Muere Hans Küng, el teólogo católico que cuestionó la infalibilidad del Papa

  • Küng está considerado como uno de los mayores divulgadores sobre temática católica en el mundo y su obra ha sido traducida a más de 20 idiomas.
  • Teología

El teólogo católico suizo Hans Küng, conocido por haber negado la infalibilidad del Papa, ha muerto este martes a los 93 años, según ha informado la Fundación Weltethos, que Küng presidía. Ha fallecido “en paz en su casa de Tubinga”, Alemania.


Küng es considerado uno de los mayores divulgadores sobre temática católica en el mundo y su obra ha sido traducida a más de 20 idiomas.

Nacido en Sursee (Lucerna, Suiza) en 1928, Küng se licenció en teología por la Universidad Gregoriana de Roma, se ordenó sacerdote en 1954 y fue destinado a la diócesis de Basilea. El Papa Juan XXIII le nombró consejero oficial del Concilio Vaticano II. Fue en 1967 cuando Küng publicó 'La Iglesia', una de sus obras polémicas en la que se pronunciaba sobre la supresión del imprimatur o censura previa de los libros teológicos y la abolición del celibato y a la que en 1976 siguió ¿Infalible?: una pregunta, en la que se manifestaba contra el dogma de la infalibilidad pontificia.

Por esta obras, el 21 de febrero de 1975 el Vaticano realizó una declaración mediante la cual no se dictaban sanciones disciplinarias contra el teólogo pero se le amonestaba a que no siguiera enseñando tesis “que se oponen a la doctrina de la Iglesia católica”, pero Küng se negó a retractarse.

En 1979, la Congregación para la Doctrina de la Fe lo sancionó con la retirada de la autorización eclesiástica para ejercer la enseñanza y precisó que “ya no podía ser considerado un teólogo católico”. Küng se convirtió en el primer sancionado del pontificado de Juan Pablo II. En 1980, dejó de pertenecer a la Facultad de Teología de la Universidad de Tubinga.

Desde 1995, presidía la Fundación Weltethos, que él creó y a través de la que se encargó de estudiar y fomentar el diálogo entre religiones. Pese a que en 2003 los líderes políticos y religiosos alemanes destacaron los méritos de Küng y solicitaron a la Iglesia católica su rehabilitación, en 1997 el cardenal Ratzinger, que después llegaría al Papado como Benedicto XVI, descartó la posibilidad de la rehabilitación del teólogo suizo.

Sobre el actual Papa Francisco, Küng confesó en una entrevista concedida en 2013 al semanario alemán Der Spiegel que confiaba en que pondría fin al celibato entre los sacerdotes católicos. También aseguró que con el Papa Francisco llegó una “primavera católica” a la Iglesia, tanto en la forma como en los contenidos, y dijo que ello “supuso una ruptura con lo que representó” el Papa anterior, Benedicto XVI.

Fuente: El País.