La marcha por Nisman reúne en Salta a una modesta cantidad de manifestantes

Las expectativas del #18F en Salta no fueron satisfechas. Una pequeña muchedumbre, estimada entre 1.500 y 2.000 ciudadanos, recorrió ayer por la tarde los casi 700 metros que separan las céntricas plazas Güemes y 9 de Julio para acabar a las puertas de los Juzgados Federales, en la esquina de las calles España y Deán Funes.

La marcha no solo fue modesta en cuanto a sus dimensiones; fue también silenciosa y pacífica, como lo habían previsto las organizaciones convocantes.

Un puñado de personalidades y dirigentes políticos acompañó la marcha, en la que brillaron por su ausencia el gobierno provincial y los miembros más notables de la nomenklatura local. Solo la presencia de algún miembro del Ministerio Público Fiscal de Salta puso la nota de la jornada.

Durante la marcha -que, a diferencia de lo que sucedió en Buenos Aires, se realizó a pleno sol- no se registraron incidentes.

Los asistentes portaban banderas nacionales y carteles en los que se reclamaba por la falta de libertad e independencia de los jueces y fiscales. Otros protestaban por lo que consideran es ya una grave crisis institucional, exigiendo el esclarecimiento del atentado contra la AMIA y la muerte de Nisman.