
La Directora General de la UNESCO describió a Nelson Mandela como “un hombre de envergadura universal que encarnaba nuestra fe en la dignidad humana, nuestra creencia en la capacidad de cada mujer y cada hombre de cambiar la sociedad mediante la tolerancia y la paz”.
El presidente haitiano Michel Martelly, invitado de honor de la ceremonia, se unió al homenaje a Mandela y declaró: “Hoy, cuando el mundo está profundamente amenazado y los hombres se radicalizan cada vez más, necesitamos otros Mandela que nos ayuden a vencer el extremismo y el fanatismo, porque de otro modo no habrá retorno posible”, declaró.
Emblema de los ideales de la UNESCO, el ex presidente sudafricano recibió en 1991, junto con su vicepresidente Frederik de Klerk, el premio Houphouët-Boigny de fomento de la paz. También fue uno de los Embajadores de Buena Voluntad de la Organización.
La UNESCO quiso rendirle homenaje también con varios números artísticos protagonizados por el cantante y músico guineano Mory Kanté, el grupo sudafricano Mahotella Quenns, la cantante camerunesa Sally Nyolo acompañada por David Myriam, artista de Sand Art y el coreógrafo Sam Tschabalala y sus bailarines.
El ex representante especial del Secretario General de la ONU en Sudáfrica, Lakdar Brahimi, leyó por su parte un fragmento de la autobiografía de Mandela, “El largo camino hacia la libertad”.
Nacida el 4 de noviembre de 1945 recién terminada la Segunda Guerra Mundial, la UNESCO se fundó con el objetivo de fomentar “la solidaridad intelectual y moral de la humanidad”. De los 20 Estados Miembros que tuvo en su creación, ha pasado a los actuales 195, que hacen de ella una organización universal que combate el analfabetismo, alienta la emancipación femenina, favorece el intercambio científico, promueve la cultura y defiende la libertad de expresión.
“En 1945, en un mundo devastado física y moralmente, confrontado al imperativo de la reconstrucción, los fundadores de la UNESCO reinventaron los cimientos de la paz, proclamando que ésta debía erigirse en las mentes de los hombres y las mujeres mediante la educación, el diálogo entre las culturas, la cooperación científica y la libertad de expresión”, declaró la Directora General.
“Hoy, el mundo se enfrenta a desafíos nuevos y considerables a los que debemos responder con el mismo coraje, la misma audacia y la misma visión, puesto que hoy la violencia ataca las escuelas, la diversidad cultural, la libertad y los derechos humanos”, añadió.
La ceremonia del 31 de octubre inaugura una serie de festejos que se prolongarán hasta noviembre de 2015. Entre las personalidades presentes figuran también Nathi Mthethwa, ministro de Artes y Cultura de Sudáfrica; el profesor y diputado de la Asamblea Nacional de Senegal Iba Der Thiam, en representación de Macky Sall, presidente de Senegal; Mohamed Sameh Amr, presidente del Consejo Ejecutivo de la UNESCO; Hao Ping, presidente de la Conferencia General de la UNESCO, Jean Chabi Orou, embajador de Benin y presidente del Grupo Africano en la UNESCO.
La ceremonia fue posible gracias al apoyo de la mecenas griega Marianna Vardinoyannis, Embajadora de Buena Voluntad de la UNESCO, y de la Delegación de China en la UNESCO.
Fuente: UNESCO.