
El Día Mundial de la Asistencia Humanitaria, que tiene lugar cada año el 19 de agosto, reconoce a quienes arriesgan sus vidas en el servicio humanitario, y desea crear una movilización en favor de la acción humanitaria.El Día, designado por la Asamblea General hace siete años, coincide con el aniversario del atentado contra la sede de las Naciones Unidas en Bagdad, Iraq en 2003.
La ONU y sus socios llaman hoy a la solidaridad mundial con los más de 130 millones de personas que en todo el mundo necesitan ayuda humanitaria para sobrevivir.
Bajo el lema de «Una Humanidad», El Día se centrará en los resultados de la Cumbre Humanitaria Mundial que reunió a decenas de líderes mundiales en Estambul en mayo, y en especial sobre los compromisos para apoyar a las personas afectadas por la crisis y garantizar que los trabajadores humanitarios pueden entregar de forma segura y eficaz la asistencia que aquellas necesitan.
Los eventos se llevarán a cabo en todo el mundo el 19 de agosto en honor a la labor de los trabajadores humanitarios. En Nueva York, una ceremonia de ofrenda floral se llevará a cabo en la sede de las Naciones Unidas, y se celebrará una reunión de alto nivel en el Salón de la Asamblea General.
Además se pondrá en marcha una campaña digital para dar a conocer las opciones imposibles que enfrentan las personas que están atrapadas en las crisis. También contará con exposiciones fotográficas y proyecciones de películas que documentan la vida de las personas afectadas por los conflictos y los desastres.
Mensaje del Secretario General
Un récord de 130 millones de personas dependen de la asistencia humanitaria para sobrevivir. Agrupadas, estas personas necesitadas constituirían la décima nación más poblada en la Tierra.Esta cifra es realmente impresionante, pero solo es parte de la ecuación. Detrás de las estadísticas hay personas, familias y comunidades cuyas vidas han sido destrozadas. Son personas como ustedes y como yo: niños, mujeres y hombres que se enfrentan a opciones imposibles cada día. Son padres que deben elegir entre comprar alimentos o medicamentos para sus hijos; niños que deben elegir entre ir a la escuela o trabajar para ayudar a sus familias; y familias que deben elegir entre arriesgarse a los bombardeos en sus países o intentar una huida peligrosa por mar.
Las soluciones a las crisis que han sumido a estas personas en estas situaciones desesperadas no son ni sencillas ni rápidas. Pero todos podemos hacer algo —hoy y todos los días. Podemos mostrar compasión, podemos alzar nuestras voces contra la injusticia y podemos trabajar para lograr cambios.
El Día Mundial de la Asistencia Humanitaria es un recordatorio anual de la necesidad de actuar para aliviar el sufrimiento. Es también una ocasión para honrar a los trabajadores humanitarios y los voluntarios que se afanan en la primera línea de las crisis. Quiero rendir homenaje a los entregados hombres y mujeres que afrontan peligros para ayudar a otros que afrontan riesgos aún mayores.
Hoy, insto a todos a que se unan a la campaña de las Naciones Unidas “El Mundo que Preferirías”. Además de sensibilizar sobre estos temas y fomentar la empatía, la campaña tiene unos objetivos concretos: recaudar dinero para el Fondo Central para la Acción en Casos de Emergencia establecido por las Naciones Unidas y conseguir el apoyo de personas de todo el mundo para que actúen como mensajeros de la humanidad. Necesitamos que todas las personas exijan a sus sociedades y sus Gobiernos que pongan la humanidad en un primer plano.
A principios de este año, 9.000 personas se reunieron en Estambul para participar en la primera Cumbre Humanitaria Mundial de la historia. Los líderes mundiales se comprometieron a transformar la vida de las personas que viven en situaciones de conflicto, desastre o gran vulnerabilidad. Todos respaldaron la Agenda para la Humanidad y su promesa de no dejar a nadie atrás.
Esta promesa es también el núcleo de los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Estos 17 objetivos mundiales, que se concentran en los derechos humanos, la resiliencia y la erradicación de la pobreza, ofrecen un plan de 15 años para reducir las necesidades y la vulnerabilidad y para promover un mundo de paz, dignidad y oportunidad para todos. Para culminar con éxito en este viaje colectivo, todos deben contribuir al proceso. Cada uno de nosotros puede influir en él. En este Día Mundial de la Asistencia Humanitaria, unámonos en nombre de la humanidad y mostremos que no podemos dejar ni dejaremos a nadie atrás.
Fuente: Organización de las Naciones Unidas - en http://www.un.org/es/events/humanitarianday/