
El Día Mundial de las Ciudades se estableció con el objetivo de promover el interés en la urbanización y fomentar la cooperación entre los países para aprovechar las oportunidades y afrontar los desafíos que plantea el urbanismo, así como para contribuir al desarrollo urbano sostenible en todo el mundo.
2020: Valorar nuestras comunidades y ciudades
El impacto de la COVID-19 ha cambiado la vida urbana en todo el mundo. Las comunidades locales han desempeñado un papel clave en la conservación de las ciudades, contribuyendo a la seguridad de las personas y manteniendo algunas actividades económicas.El valor comunitario abarca el voluntariado local y las personas que se organizan en sus propios barrios, así como los movimientos sociales que desafían la pobreza, la discriminación sistémica y el racismo. En particular, en los asentamientos informales y los barrios marginales, las comunidades están haciendo una contribución significativa, mientras que los hogares en las áreas urbanas brindan un entorno propicio para trabajar y estudiar en casa.
El último Informe de Ciudades del Mundo de ONU-Habitat, refuerza los beneficios de las ciudades que involucran a todas las partes interesadas, incluidas las comunidades locales para promover ciudades sostenibles. El Secretario General ha identificado a las ciudades y comunidades en la primera línea de la respuesta al COVID-19. Colectivamente, podemos fomentar verdaderamente ciudades sostenibles para todas las personas.
Las actividades comunitarias ya no pueden darse por sentadas o carecer de recursos. Los formuladores de políticas y los administradores urbanos deben involucrar a las comunidades de manera sistemática y estratégica en la planificación, implementación y monitoreo urbano para co-crear las ciudades del futuro.
El reconocimiento del valor de las comunidades debe mantenerse más allá del brote del virus. En la transición hacia la nueva normalidad urbana sostenible, las comunidades locales deben desempeñar un papel más amplio apoyando los paquetes de estímulo del gobierno para la creación de empleo, la prestación de servicios esenciales, asegurando una transformación económica ecológica, la provisión de vivienda y espacio público adecuados y el restablecimiento de las cadenas de valor local.
¿Por qué un Día Mundial de las Ciudades?
La urbanización ofrece la posibilidad de nuevas formas de inclusión social, entre ellas una mayor igualdad, el acceso a los servicios y a las nuevas oportunidades, así como el compromiso y la movilización que refleja la diversidad de las ciudades, los países y el mundo. Sin embargo, con demasiada frecuencia esta no es la forma de desarrollo urbano. La desigualdad y la exclusión abundan, a menudo en tasas superiores a la media nacional, a expensas del desarrollo sostenible que sirve para todos.En este contexto se enmarca la resolución A/RES/68/239 de la Asamblea General, por la que en 2014 se estableció el 31 de octubre, como el Día Mundial de las Ciudades.
En 2014, ONU Hábitat lanzó una iniciativa, Octubre Urbano, para poner de relieve los desafíos urbanos mundiales e involucrar a la comunidad internacional en el desarrollo de la Nueva Agenda Urbana, aprobada en octubre de 2016 en la ciudad de Quito durante la Conferencia de Hábitat III. Esta Nueva Agenda Urbana es la brújula para hacer frente a los desafíos de las ciudades en las próxima dos décadas y ha de ser vista como una extensión del Objetivo de Desarrollo Sostenible número 11 de la Agenda 2030.
Mensaje del Secretario General
En este Día Mundial de las Ciudades, reconocemos la extraordinaria contribución de las comunidades de base en nuestras ciudades y pueblos.Las ciudades han sido las más afectadas por la pandemia.
Las zonas urbanas ya albergan el 55 % de la población mundial, y se prevé que esa cifra aumentará al 68 % para 2050.
Nuestro mundo en rápido proceso de urbanización debe responder eficazmente a esta pandemia y prepararse para futuros brotes de enfermedades infecciosas.
Dado que en muchos casos la pandemia desborda los servicios de salud pública y de apoyo, las comunidades se han organizado para mantener sus vecindarios seguros y en funcionamiento, colaborando con los gobiernos locales y nacionales para apoyar la respuesta oficial.
Hemos visto a vecinos haciendo la compra y cocinando para los enfermos y los ancianos, residentes animando a los trabajadores sanitarios, y grupos locales religiosos y de voluntarios apoyando a las personas vulnerables.
Las comunidades son innovadoras, resilientes y proactivas.
Juegan un papel vital en la construcción de ciudades sostenibles desde una perspectiva económica, social y ambiental.
Sigamos reconociendo su valor.
A medida que reconstruimos mientras vamos superando la pandemia y nos involucramos en el decenio de acción en favor del desarrollo sostenible, tenemos la oportunidad de repensar de raíz la forma en que vivimos e interactuamos.
La acción a nivel local es la clave.
Cuando las comunidades urbanas participan en la formulación de políticas y en la toma de decisiones, y cuando se las dota de recursos financieros, los resultados son más inclusivos y duraderos.
Hagamos que nuestras comunidades sean el corazón de las ciudades del futuro.
Fuente: Organización de las Naciones Unidas - en https://www.un.org/es/observances/cities-day