
Pero para la Municipalidad de Salta parece que las cosas no son tan claras.
La Subsecretaría de Control y Planeamiento Urbano de la comuna salteña ha impuesto una sanción administrativa a la empresa Telecom «por no contar con ningún tipo de autorización municipal» para instalar una antena de telefonía en el barrio Círculo I y que ha iniciado actuaciones tras haber detectado «otros dos casos de trabajos clandestinos» con la misma finalidad en Tres Cerritos y en la calle Zuviría al 1300.
Para que la Municipalidad califique de clandestinas a estas obras, es necesario que Telecom las haya ocultado; es decir, que las haya hecho de forma secreta, por temor a la ley o con la finalidad de eludirla. Y no parece que éste sea el caso, ya que, según la propia Municipalidad, la empresa, antes de ser sancionada, recibió una advertencia de la autoridad y una intimación a paralizar la obra, lo cual pone de manifiesto de que la obra no se hallaba oculta ni había sido iniciada de forma secreta.
Por otra parte, cualquiera que conozca las formas y las dimensiones de una antena de estas características puede darse cuenta de que es bastante difícil practicar una instalación en secreto. El rendimiento de una antena para las longitudes de onda de las bandas autorizadas para las comunicaciones telefónicas está directamente relacionado con su instalación al aire libre, por lo que hablar de instalación clandestina en este caso equivaldría a admitir que se puede también construir de forma secreta grandes edificios.
El Director General de Inspecciones Edilicias de la Municipalidad, señor Sebastián Soler, ha dicho que «con total impunidad la empresa y los particulares multados e intimados iniciaron las obras sin haber empezado ni siquiera un trámite en la Municipalidad», una afirmación bastante discutible.
En primer lugar, porque tal y como surge de la propia comunicación municipal, no hubo impunidad y menos «total», ya que la empresa y los particulares fueron debidamente sancionados. En segundo lugar, porque si la falta cometida fue haber iniciado las obras sin antes haber solicitado y obtenido los permisos correspondientes, lo que no se puede decir por ningún funcionario o administración responsable es que las obras se hayan iniciado de manera clandestina.