La Municipalidad de Salta ha resuelto aumentar en un 33,3 por cien la tarifa del estacionamiento medido en las calles de la ciudad. A partir de la entrada en vigor de la ordenanza municipal 14571, que fue sancionada a finales de mayo pasado, el precio por hora para estacionar un vehículo, en cualquier franja horaria, quedará establecido en 4 pesos. El estacionamiento medido para vehículos en Salta -una ciudad que roza los 600.000 habitantes- carece de máquinas automáticas expendedoras de tickets, por lo que el cobro y el control corre por cuenta de 'permisionarios' (una especie de «señores de la guerra» que viven de la autorización municipal) que confeccionan los tickets, denuncian a los infractores a voluntad y son completamente opacos al control ciudadano.
La ordenanza etablece que el 80% de lo recaudado será percibido por los permisionarios (lo que quiere decir que irá a parar al bolsillo de estos) y el 20% restante por el Ejecutivo municipal.
Según las estimaciones municipales, unos 400 de estos "socios" del fisco gobiernan las calles de Salta. Todos ellos confeccionan los tickets a mano, con escritura a menudo ilegible; no disponen de ningún soporte electrónico de control ni de lugares adecuados para realizar su tarea, aunque para disimular su inveterada mala educación, la autoridad ha previsto que reciban formación en materia turística, en la creencia de que así ayudará a mejorar las posibilidades de trabajo de estas personas.
Ya con anterioridad y para velar por su seguridad personal, la Municipalidad les había hecho entrega de unos 400 chalecos "refractarios".