Se niega a declarar durante la primera jornada del juicio el acusado de matar a Elisandra Condorí

  • La Quinta Sala del Tribunal de Juicio de la ciudad de Salta juzga desde ayer al ciudadano Miguel Ángel Ajalla (63), acusado de ser el autor de un delito de homicidio agravado por el vínculo y por violencia de género, cometido contra Elisandra Condorí.
  • Juicio penal en Salta

En la primera sesión del juicio se ha dado lectura a la requisitoria fiscal de elevación a juicio y se ha dado comienzo al examen de los testigos propuestos por las partes personadas. El acusado ha optado por ejercer su derecho a no declarar, si bien ha dicho que lo hará más adelante.


En calidad de testigos han comparecido ante el tribunal el ciudadano Milagro Miguel Chorolque, conocido del imputado que estuvo presente en la fiesta durante la cual ocurrió el homicidio; José Alberto Silisque, oficial de Policía que prestaba servicios en la Comisaría de Cobos cuando ocurrieron los hechos; Rodrigo Bautista, oficial principal de la División Homicidios del CIF, quien tuvo a su cargo la investigación preliminar; Carmelo Cabana Maraz, hijo de crianza de la víctima y del acusado, presente en la fiesta la noche de los hechos; Mariela Alejandra Collivadino, médica psiquiatra del CIF, y María Virginia Albarracín, médica psiquiatra del servicio médico del Poder Judicial.

Condorí murió el 24 de marzo de 2018 en el domicilio del acusado Ajalla, sito en la localidad de Cobos. La noche de autos se celebraba allí la fiesta de 15 años de una de las hijas comunes de la pareja. En aquel momento, Ajalla y Condorí llevaban alrededor de un mes y medio separados. En el lugar se encontraban los otros hijos de la pareja y varios familiares.

Según manifestaciones de testigos, Ajalla, que había estado bebiendo alcohol desde el mediodía, quiso revisarle el teléfono celular a su expareja, lo que desencadenó una discusión que en aquel momento no impidió que la fiesta siguiera su curso. Alrededor de las 1.30 -siempre según el relato de los testigos- la víctima se dirigió a una de las habitaciones de la casa a buscar una campera. Momentos después se escucharon gritos. Los hijos de Condorí corrieron en su ayuda pero la puerta estaba cerrada por dentro. Uno de ellos logró abrirla a patadas, pero al entrar a la habitación vieron a la mujer en el suelo, ensangrentada, mientras el acusado permanecía de pie a su lado, sujetando un cuchillo.

Elisandra Condorí murió a causa de un shock hipovolémico provocado por una lesión vital en el corazón.

Las sesiones del juicio se extenderán hasta el próximo día viernes 29 de marzo.