La señora María Victoria Montoya Quiroga, que ocupa un cargo en la Sala II del Tribunal de Juicio de la ciudad de Salta, ha condenado en audiencia de juicio abreviado a un hombre de 63 años, a quien encontró culpable de haber cometido un delito de abuso sexual gravemente ultrajante contra una menor de edad.
La señora Montoya ha impuesto al hombre una pena de cuatro años y diez meses de prisión de ejecución efectiva, por lo que en el mismo acto de la audiencia ha ordenado su detención e inmediato traslado a la prisión.
Dice el portavoz judicial que la misma sentencia que lo condena, absuelve al acusado del delito de corrupción de menores del que había sido también acusado, por haberse abstenido el fiscal de sostener la acusación en el momento procesal oportuno.
La magistrada ha ordenado que se registren los datos genéticos del condenado.
Según el portavoz de prensa del Poder Judicial salteño, la denuncia de los hechos fue formulada por la madre de la víctima. La mujer relató que el agresor es tío de su pareja y que los abusos salieron a la luz en el marco de una discusión, cuando le reclamaban a la menor su falta de interés con respecto a las actividades familiares.
El relato dice que la menor de edad, «en un evidente estado de nervios», contó que el hombre había abusado de ella cuando tenía 10 años, un día que sus padres habían salido a trabajar y que el acusado se encontraba en la vivienda realizando trabajos de construcción. Un hecho similar se repitió cuando ella tenía 12 años de edad.