El Consejo de la Magistratura de la Provincia de Salta ha declarado desierto el concurso oportunamente convocado para proveer una plaza de juez del Tribunal de Juicio de la ciudad de Tartagal.
En una comunicación oficial, el consejo expresa que, efectuada la evaluación «integral» de los aspirantes, que incluyen el «entrevista personal», se ha llegado a la conclusión de que es imposible integrar la terna. Las pruebas a que los candidatos han sido sometidos no han dado como resultado tres aspirantes con un nivel adecuado para el cargo, de acuerdo con lo establecido en el artículo 19, cuarto párrafo, de la Ley Nº 7016 y 45 del Reglamento Interno.
El Consejo de la Magistratura llama, con cierta generosidad, «entrevista personal» a una especie de audiencia de absolución de posiciones en la que, junto a preguntas de contenido técnico, los candidatos son sometidos al escrutinio de sus convicciones democráticas por unos examinadores que dudosamente las poseen.
Dice la información oficial, que el tribunal que ha tomado esta decisión ha estado presidido por el señor Guillermo Catalano e integrado por el señor Edgardo Albarracín, dos de los más visibles impulsores de la reforma contra natura de la Constitución provincial a través de una decisión de la Corte de Justicia.
Los democráticos magistrados han resuelto convocar a un nuevo concurso público para esta plaza que permanece vacante, en fechas que se darán a conocer en el momento procesal oportuno.
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