
El joven Nava, quien ha sido merecedor de una pena de tres años de prisión, no ingresará sin embargo en prisión, al haber declarado la magistrada la ejecución condicional de la condena.
La libertad condicional del condenado es, por tanto, revocable, y está sujeta a las siguientes reglas de conducta: no cometer nuevo delito, abstenerse del uso de estupefacientes y del abuso de bebidas alcohólicas, someterse al cuidado del Patronato de Presos y Liberados, todo lo anterior durante el plazo de dos años que señala el Código Penal.
Además, si Nava no quiere cumplir efectivamente los tres años de condena, deberá pagar diez cuotas consecutivas de 500 pesos a la víctima en concepto de reparación integral.
En el mismo juicio fueron sobreseídos los ciudadanos José Alejandro Gómez y Leandro Ariel Liendro por no existir elementos suficientes para mantener la acusación, según informa el portavoz de prensa del Poder Judicial salteño.
El hecho enjuiciado ocurrió el 28 de febrero de 2014 alrededor de la 1 de la madrugada, en el barrio de Tres Cerritos. El condenado fue denunciado por haberle robado, en colaboración con otros, el teléfono celular y la camiseta a un menor que circulaba en la vía pública.
Fuente: Poder Judicial de Salta