Detienen en Buenos Aires a 35 activistas de Greenpeace

Treinta y cinco activistas de la organización ambientalista Greenpeace han sido detenidos hoy por la Policía Federal cuando dos de ellos se encontraban encaramados en el mástil que sostiene la bandera nacional frente a la Casa Rosada.

Según la información suministrada por Greenpeace, sus activistas se aprestaban a desplegar un cartel con la leyenda “Macri protegé los glaciares, cerrá Veladero”.

Según el coordinador de la campaña de glaciares de la organización, la policía detuvo a los activistas «mientras realizaban un reclamo en forma pacífica».

Greenpeace pide que el gobierno nacional cumpla efectivamente con la Ley de Glaciares, realice el inventario correspondiente para establecer dónde existen áreas glaciares y periglaciares y cierre la mina Veladero.

Según los ambientalistas, con sus últimas medidas, «el gobierno ha dejado en claro que privilegia la actividad minera por sobre la preservación de estos ecosistemas, que son fuentes hídricas sumamente importantes para nuestro país».

Recuerda Greenpeace que hace dos semanas, el hidrólogo estadounidense Robert Moran fue convocado como experto en la causa que lleva adelante el juez Casanello por el derrame de agua cianurada ocurrido en la mina en septiembre pasado, y declaró que la información brindada por la empresa Barrick fue insuficiente. Además, el especialista pudo determinar que Veladero se encuentra sobre área periglaciar, lo que haría ilegales las operaciones extractivas en el lugar, si se cumpliese la ley sancionada en 2010.

Por su parte, Diego Seguí, abogado de la Asamblea Ambiental de Jachal, la localidad afectada por el derrame, ha dicho: “No sólo se afectó el río, también la confianza. Barrick mantiene en su poder los resultados de laboratorio del área afectada. Lamentablemente, estos ocultamientos ya son repetidos: el proyecto Veladero se inició sin la audiencia pública que dispone la Ley General del Ambiente”.

Greenpeace sostiene que la eliminación de las retenciones a la minería, ordenada por el presidente Mauricio Macri, permite a una de las industrias más peligrosas y contaminantes seguir avanzando sin control sobre los recursos naturales del país.

Fuente: Greenpeace