
La renuncia de Torino de Morales se produce en medio de la polémica desatada en torno a la distribución, por parte del gobierno provincial, de una enciclopedia escolar en la que se incluye un mapa que designa a las Islas Malvinas con el nombre de Falkland.
Si bien la editorial responsable de la publicación adujo en su momento que tal inclusión obedece a un error y que los textos serían enmendados con un autoadhesivo que "dejaría clara" la postura argentina sobre la titularidad soberana de las Islas, estas medidas fueron consideradas insuficientes por algunos sectores que interpretan que el error, más allá del nombre, consiste en "atribuir la soberanía británica sobre las Islas", extremo que hasta el momento no ha podido ser confirmado.
Torino de Morales deja su cargo después de haber superado, no sin dificultades, las presiones sindicales de las poderosas organizaciones docentes que amenazaron con no iniciar las clases del presente ciclo lectivo si no se corregían al alza sus salarios. La gestión de la exministra estuvo igualmente dificultada por las duras condiciones climáticas de finales del verano pasado, que impidieron el normal desarrollo de las clases en algunos centros escolares de la Provincia y por el deficiente estado de conservación de las escuelas, algunas de las cuales se encuentran en el mismo centro de la ciudad de Salta.
Pero si la renuncia de la ministra se interpretara como una asunción de responsabilidades políticas por parte del gobierno en relación con la errata cartográfica, no está del todo claro si la dimitente Morales de Torino ha tenido o no responsabilidad directa en la contratación de las empresas editoriales y en la definición de los objetos de que se compondría el ya famoso "kit escolar", con el que el gobierno sorprendió a propios y extraños al comienzo del año escolar.
Queda por ver ahora, si detrás de esta ambiciosa operación se ocultan intereses económicos o de otro tipo que pudieran haber opacado su ejecución, más allá de trascendencia que algunos atribuyen a lo que, hoy, sólo parece un descuido bastante gordo en la selección de un mapa.
En cualquier caso, el recambio producido en el gobierno, que se suma al desplazamiento que en su momento afectó a la exministra Silvia Miranda, de Desarrollo Humano, viene a dejar en claro que el gobernador Urtubey está dispuesto a ejercer su autoridad y a romper con la inercia de la administración romerista, que toleró e, incluso, disimuló hasta extremos poco recomendables, algunos sonados escándalos que afectaron a varios de sus cuadros más prominentes.