
Manuel J. Castilla es uno de los poetas más significativos de la literatura de Salta.
Nació en la estación de trenes de Cerrillos un 14 de agosto de 1918.
El distinguido escritor salteño fue uno de los fundadores del mítico grupo La Carpa, que reunió a una generación irrepetible de talentos literarios.
Entre sus obras más recordadas se cuenta a Agua de lluvia (1941), Luna Muerta (1944), La niebla y el árbol (1946), Copajira (1949,1964, 1974), La tierra de uno (1951, 1964), Norte adentro (1954), El cielo lejos (1959), Bajo las lentas nubes (1963), Amantes bajo la lluvia (1963), Posesión entre pájaros (1966), Andenes al ocaso (1967), Tres veranos (1970), El verde vuelve (1970) y Cantos del gozante (1972), Triste de la lluvia (1977), Cuatro Carnavales (1979). También publicó un texto en prosa: De solo estar (dos ediciones en 1957) y el libro Coplas de Salta (1972, con prólogo y recopilación de Castilla).
El ilustre poeta falleció el 19 de julio de 1980, a los 61 años de edad.
Los restos de Castilla recibieron sepultura al día siguiente, un 20 de julio de 1980, en el cementerio salteño de la Santa Cruz, en donde fue despedido por amigos, poetas, escritores y folkloristas.