
La exposición contempla un relato explora la conformación del primer Museo de Arte en Salta, a través de sus colecciones fundacionales y el marco institucional que lo hizo posible.
El Museo Colonial, Histórico y de Bellas Artes se inaugura el 9 de julio de 1930 en un momento en el que el campo artístico comenzaba su proceso de institucionalización con un modelo que en Europa se había consolidado ya en el siglo XIX: las exposiciones, el museo, los salones y las academias de arte.
En aquel año la ciudad de Salta contaba con diferentes instituciones que fomentaban el desarrollo del arte local: la Asociación Estímulo al Arte, cuyo estatuto fue aprobado en 1921; la Escuela de Dibujo y Pintura, creada en 1928 y que dos años después contaba con ciento cincuenta alumnos; el Museo; la Sociedad Amigos del Arte; y el primer Salón de Dibujo y Pintura.
Las colecciones fundacionales fueron tres: las del Museo Nacional de Bellas Artes, el Museo Histórico de Luján y la Escuela de Artes Decorativas de la Nación. A las mismas se sumaron donaciones particulares.
Esta exposición propone no solo un espacio expositivo sino social, en el cual conviven las obras de artes de las colecciones fundacionales con objetos y archivos de época, con la participación de cuatro artistas contemporáneos que dialogan con estas obras a través de recursos de las nuevas tecnologías, además de una obra audiovisual que parte de archivos fílmicos de la Nación realizada especialmente para esta exposición.