
Según el gobierno, son más de 3600 los policías que reforzarán «trabajo preventivo» con controles de vehículos, comerciales, gastronómicos y patrullajes en zonas urbanas y puntos estratégicos.
El objetivo -dice el gobierno- es el de «incrementar la presencia policial activa y permanente e impedir conductas delictivas, contravencionales y situaciones que atenten contra las medidas dispuestas en el marco de la emergencia sanitaria COVID-19».
Informa también el gobierno que a la presencia de agentes humanos y recursos «logístico» se suma lo que allí llaman el «patrullaje virtual» que no es otra cosa que la vídeovigilancia callejera. La Policía también utilizará aplicaciones para localizar a personas requeridas por la justicia.
Dice la información oficial que la Dirección de Seguridad Vial de la Policía va a intensificar los controles a los conductores de vehículos, especialmente el cumplimiento de la norma que fija en 0 el límite permitido de la tasa de alcohol en sangre. Para ello habrá puntos fijos y móviles en zonas estratégicas de las rutas provinciales, nacionales y calles de los centros urbanos de toda la Provincia.