Jean-Charles Chatard: ‘Si Gustavo Sáenz acierta, va a ser el hombre del siglo XXI en la Provincia de Salta’

  • El pasado sábado 30 de noviembre, Iruya.com reunió en un hotel de Madrid al periodista corso Jean-Charles Chatard, autor del celebrado libro ‘Francesas - Autopsia de un doble asesinato’, y a Facundo Singh Peñalva, miembro de una muy activa y valiente familia salteña que lucha desde hace años por el esclarecimiento del crimen de la joven Luján Peñalva, ocurrido en Salta en julio de 2012.
  • Entrevista exclusiva de Iruya.com

La extensa charla ha girado en torno a los principales problemas que afronta la sociedad salteña en la actualidad, la pesada herencia de los doce años seguidos de gobierno de Juan Manuel Urtubey, las reivindicaciones de las mujeres, los bloqueos judiciales, las mentiras policiales, la ineficiencia fiscal y, especialmente, la esperanza y la ilusión que despierta en ellos la reciente elección de Gustavo Sáenz como Gobernador de Salta.


La conversación ha discurrido del siguiente modo:

Iruya.com - Nos gustaría preguntarle a Jean-Charles Chatard, un periodista extranjero con una destacada trayectoria como investigador, productor y documentalista en diferentes países del mundo, ¿qué es lo que le ha llevado a interesarse tan intensamente por la Provincia de Salta y por los salteños?

Jean-Charles Chatard - Hay una sociedad muy particular en Salta que no existe en otro lugar del mundo. Yo pertenezco a una clase media en Francia y me ha llamado la atención la peculiar estructura social de Salta. Ello me ha empujado a intentar encontrar una explicación racional al hecho de que una clase alta predomine absolutamente sobre toda la clase baja. En Salta existe un sistema feudal muy viejo, de mucha antigüedad, y entre las cosas que he visto y que me parecen dignas de estudiar se cuenta el hecho de que en la época contemporánea, en poco tiempo, se cometió en Salta una especie de genocidio total contra los indígenas.

Salta es una provincia de contrastes, en donde hay un lugar también para el narcotráfico. Hablo de un territorio totalmente abierto, con dos fronteras, en Aguas Blancas y Salvador Mazza. Para mí, como europeo, es un lugar fuera de la realidad. Es lo primero que me fascinó de esta provincia.

La segunda cosa que me llevó allí es el asunto de las chicas francesas, que me ha permitido conocer con mayor profundidad una sociedad a la que yo conocía anteriormente desde fuera. Investigar durante tanto tiempo me ha abierto la puerta de la casa de los humildes; también la de la casa de los ricos e incluso las puertas de la cárcel. Es decir, que he tenido la oportunidad de ver toda esta realidad de frente; una realidad que normalmente, como un ciudadano normal, como un francés que vivía en Buenos Aires, no era fácil conocer.

I.C. - Ya que nos habla de esa sociedad feudal, atrasada, desigual, permeable al narcotráfico, ¿qué responsabilidad cree que tiene el gobierno provincial en la configuración de esa sociedad?

J.C.C. - Para mí no hay político electo que haya conseguido sus objetivos sin la ayuda del narcotráfico. Un ejemplo es la ciudad de Marsella, la segunda ciudad de Francia, en donde durante muchos años los alcaldes han venido ganando las elecciones con la ayuda de la mafia de Marsella. Pienso que el narcotráfico ayuda mucho a la elección de un gobernador o de un intendente y particularmente de los intendentes cuya ciudades se encuentran cerca de la frontera.

Este es un punto fundamental para entender cómo se maneja lo que podríamos llamar «la plata sucia». Comprender cómo funcionan estas redes complejas explica en buena medida cómo se puede comprar un silencio, corromper a un policía, comprar la voluntad de un abogado de la parte contraria, y hacer todo esto de una manera completamente opaca. Por eso es que ha capturado mi atención este tipo de frontera abierta sin control, como la de Aguas Blancas en el norte de Salta, porque ellos, los políticos, necesitan de ese sistema para hacerse con los recursos ilícitos que le permitan pagar la corrupción. Porque estos recursos no salen del bolsillo de los políticos sino del bolsillo del narcotráfico.

I.C. - Ahora pasamos de la responsabilidad que pueda tener el gobierno en la configuración de esa sociedad a preguntar qué influencia puede tener ese circuito del crimen organizado o de la mafia en el funcionamiento de la justicia. Sabemos bien que el Gobernador de la Provincia de Salta se ha llenado la boca hablando de independencia del Poder Judicial, de calidad de la justicia, de sus logros en materia de mediación, etcétera. ¿Qué le ha parecido, durante el tiempo que ha estado en Salta, el funcionamiento de la justicia provincial?

J.C.C. - Voy a hacer una afirmación provocadora, a propósito: Para mí la justicia de Salta es un gran prostíbulo abierto, en donde todo depende de una sola persona. Hay toda una cadena.

I.C. - En un documental rodado por la televisión francesa que en la Argentina no se pudo emitir de forma regular a causa de una medida judicial, el juez doctor Pucheta, ya fallecido, afirmó que la justicia de Salta no es independiente y que la famosa carta anónima que recibió Jean-Michel Bouvier después del asesinato de su hija era una prueba de que la justicia de Salta no era independiente. ¿Qué razones tenía el juez Pucheta para decir eso?

J.C.C. - Me alegro de que me pregunte esto porque me da la oportunidad de aclarar, otra vez, algunas cosas muy importantes en relación con ese documental.

Lo primero que tengo que subrayar es que a este documental yo solamente acudí como testigo. Un periodista viene de Francia y me pide que le haga de guía en un recorrido por la Quebrada de San Lorenzo y otros lugares de Salta. Es decir, no fui yo quien produjo este documental ni definió su contenido. Soy productor en mi vida profesional, pero esta no fue mi película. Tampoco fui autor o realizador, porque otras personas tenían esta responsabilidad. Yo solamente hablé de mi investigación y punto. Todo el impacto que tuvo este documental es fruto del trabajo del periodista que lo hizo, no del mío.

La segunda cosa muy importante que necesito aclarar es que cuando fuimos a San Luis, a la casa del doctor Pucheta, el periodista francés que rodó el documental entregó al doctor Pucheta la carta anónima sin los nombres y apellidos. Entonces cuando el juez vio esta carta anónima, en el momento de la entrevista, él no pudo ver ningún nombre, ningún apellido impreso. Por tanto, no estaba Pucheta en disposición de acusar o de señalar a alguien en particular con el dedo.

Es decir que cuando el doctor Pucheta le responde al periodista que la justicia de Salta no es independiente, él no puede decir «son ellos», porque él no vio la carta con los nombres. Pucheta solo vio entonces la carta, tal cual aparece publicada en mi libro: con los nombres borrados.

Ahora bien, como la carta en cuestión contiene una narración de los hechos, pienso que el doctor Pucheta, antes de emitir su contundente juicio, se habrá formado una idea de cómo pudieron haberse sucedido los hechos, pero jamás saber quién los cometió. Hablamos de cosas totalmente diferentes.

No hay que olvidar que esta carta, con los nombres y apellidos no borrados, yo la entregué a la justicia francesa. Por ahora nada se mueve allí en relación con este asunto. Hace poco, le contactaron a Bouvier para notificarle que habían decretado un sobreseimiento general. Pero Bouvier se ha opuesto, ya que el sobreseimiento comporta el final de todo tipo de investigación y Bouvier no quiere que eso se produzca. Es decir, que la actividad de la justicia francesa en relación con el asesinato de Cassandre Bouvier y Houria Moumni continúa con la misma intensidad que antes, y por ello, en cualquier momento, siempre, si hay novedad, la investigación se puede reanudar y con ella la adopción de nuevas medidas.

I.C. - Después de más de ocho años desde el crimen de las turistas francesas en Salta, ¿cómo ve en general la marcha de ese proceso, cómo valora la reacción de los salteños frente a tan complicado asunto, la reacción del gobierno, la reacción internacional?

J.C.C. - Después del caso de las francesas, del caso de Luján Peñalva y Yanina Nuesch, del caso Jimena Salas y de otros múltiples casos, yo creo que el pueblo de Salta ha dictado sentencia en las votaciones del 27 de octubre y del 10 de noviembre pasados. Pienso que el gobernador Urtubey, con todo su desastre judicial, ha pagado con la derrota en las urnas todo lo que hizo mal en relación con estos asuntos. Al final hay una justicia. El pueblo hace justicia colocando una papeleta de voto en una urna para decir adiós definitivamente a una persona que manejó la justicia a su antojo, como un tirano, como un déspota.

En estos momentos pienso que el mejor trabajo para Urtubey, cuando deje su cargo de Gobernador, consiste en escribir su historia, con su esposa actriz de cine. Para sacar una novela, pero una novela suya. Una ficción, no una realidad.

I.C. - Nos gustaría preguntarle ahora a Facundo Singh Peñalva si no le llama la atención la situación en la que está Salta y si no cree que podría estar mejor de lo que está ahora.

F.S.P. - Indudablemente Salta está atada al destino del país. La situación general de la Argentina influye en el momento por el que está atravesando Salta. Pero sí, sin dudas, hay factores locales que contribuyen a agravar la situación. Si tenemos en cuenta los recursos de la coparticipación federal y haber llevado el mando de una provincia por doce años, no es una cosa menor. Cualquier político hábil, con los fondos que tuvo, en el momento de crecimiento que también tuvo, tendría que haber hecho mínimas cosas. Aquí nosotros nos concentramos en la justicia, pero también hay falta de infraestructuras; está el tema de las comunidades indígenas, la desnutrición, que no puede existir en el país y mucho menos en Salta, o el narcotráfico. Hay tantos puntos por los que se puede encarar la realidad de Salta, que está tan mal en este momento, que no quedan dudas de lo que faltó por hacer y de la deuda que le quedó a Urtubey.

J.C.C. - Me gustaría opinar sobre este tema también. Salta es un paraíso. Un paraíso del ambiente, un paraíso cultural en donde hay una mezcla espectacular, con muchos países cercanos. También hay, según mi opinión, una manera de luchar que es totalmente diferente a la que hay en la capital porteña.

En relación con el ambiente, pocas dudas caben de que Urtubey ha provocado el más grande daño de toda la historia: el desmonte, el peor fracking o el litio. Sin preguntar a la comunidad, el Gobernador saliente ha cometido una masacre ambiental y de salud. ¿Para beneficio de quién? Pues, en principio, de canadienses, chinos, franceses y supuestamente de los políticos del lugar. No debemos olvidar que estamos en un lugar en donde hay mucho sol y hay mucho viento, y que por tanto puede ser un lugar espectacular para las energías renovables, que hoy por hoy apenas si existen en Salta. Otra cosa que se debe destacar es la utilización loca, muy loca, del glifosato y de la genética modificada. Salta tiene mucha cultura agrícola diferente, mucha mezcla. Las personas pueden aportar mucho a la producción sin recurrir a la industria, funcionando como un mercado cerrado, sin endiosar al rendimiento por el rendimiento mismo. La agricultura y la ganadería natural son posibles en Salta. Es responsabilidad del Gobernador que no se haya desarrollado este sector de la economía.

El segundo elemento importante es la mezcla cultural. Pido disculpas de antemano por decir esto, pero cuando hay un Club 20 de Febrero como el que hay en Salta, la mezcla cultural es imposible de manejar. Una mezcla cultural que consiste en sacar el poncho el día de la fiesta de Güemes, de disfrazarse de gaucho, cuando tú te manejas con un club fuera de la realidad, un club que digita una parte de la economía y de la política, controla la palanca, el clientelismo y la justicia también. La mezcla cultural con Urtubey fue imposible. Me refiero a la mezcla del pueblo indígena, de los mestizos y los blancos, que siguen siendo el poder. Yo soy blanco y me disculpo. Pero esto no me impide abrir los ojos y ver que Urtubey ha aumentado las diferencias sociales en vez de achicarlas.

La forma de luchar en Salta es también totalmente diferente. Ver allí todos los viernes a los familiares contra la impunidad es algo muy difícil de ver en otro lugar. En Buenos Aires, desde luego, no pasa nada ni parecido. Hay allí muchos asesinatos y crímenes con mucha impunidad, pero algo como la marcha de los viernes no existe. Yo apoyo esta dinámica de hacer ver al pueblo en la plaza, frente a la iglesia, la principal y más conocida, y de hacerlo hablar para que todos escuchen.

Y hay otra cosa más que me gusta mucho en la lucha de los salteños que es la lucha de la mujer, a la que Urtubey, por cierto no ha ayudado mucho. Porque en Salta, a mi modo de ver, casi no existen las feminazis. En Salta la mujer es totalmente diferente. Hay movimientos feministas, pero no extremos. Es muy interesante, porque la moderación les permite ganar más cosas, mucho más de lo que podrían ganar con violencia.

Pero Urtubey no ha ayudado mucho, aun teniendo en cuenta que ha gobernado la segunda provincia argentina con más feminicidios, en donde hay una cantidad importante de casos sin resolver, en donde no hay ayudas a las familias desgarradas por el feminicidio. Como toda respuesta, Urtubey ha creado un observatorio totalmente falso e inútil. Su actitud en este asunto se parece de algún modo a la de Evo Morales, que habla tanto de los indígenas pero que tiene un comportamiento de blanco.

I.C. - ¿No cree que una buena parte de las feministas de Salta, por no decir casi todas, están contratadas a sueldo del gobierno?

J.C.C. - No. Estoy seguro que no. Porque hay una persona que destaca en este terreno por sobre todas las demás. Yo he apoyado a esta persona particularmente sin fijarme en su color político. Su ideología es comunista, que no es la mía, pero yo la apoyé para la elección nacional. Ella se llama Verónica Lía Caliva. Es una persona a la que yo conozco muy bien, una persona muy humilde, con mucha integridad y que tiene una importante trayectoria en la lucha por la mujer.

Una trayectoria que no es muy conocida porque no ha transcurrido ni se ha planteado como un espectáculo. Esta persona ha hecho un trabajo excepcional y ahora ha ganado un escaño en la Cámara de Diputados de la Nación. Yo creo que el futuro de Salta vendrá de la mano de una mujer o de mujeres. Enviar a Caliva a Buenos Aires es una excelente señal para la democracia. Yo estoy muy seguro de que no le gusta a Juan Manuel Urtubey.

I.C. - ¿Qué es lo que le inclina a pensar que a Urtubey no le gusta el perfil de la diputada Caliva?

J.C.C. - No hay muchas personas que tengan integridad en este gran prostíbulo. Es una persona que garantiza que va defender a la mujer sin montar espectáculo y con eficacia. Y estoy esperando que junto a Victoria Donda, de la que es muy amiga, conforme un equipo en el que destaque la persona humana por sobre el color político o las lealtades con los gobernantes de turno.

F.S.P. - Urtubey tiene un conservadurismo muy anticuado. Creo que todos pensamos que maneja la provincia de Salta como un feudo. Él prometía ser en un momento una persona moderna. De hecho era bien joven cuando empezó en política. Yo escuché una de sus charlas en la Universidad Católica cuando era diputado todavía y tenía unas ideas bastante interesantes. Y terminó siendo todo lo opuesto a lo que prometía ser. Cuando hablamos de la mujer, cuando hablamos de la religión, él no se puede despegar de esas ideas anticuadas que son las ideas de la Salta antigua, de la Salta oligárquica y conservadora.

I.C. - ¿Cómo ven el cambio de gobierno que va a haber en Salta? Probablemente va a haber también un cambio en la presidencia de la Corte de Justicia de Salta. ¿Cómo va a influir el cambio político, la sustitución de Urtubey por Gustavo Sáenz, la probable sustitución de Guillermo Catalano y la posibilidad de que Rodolfo Urtubey sea el primer juez de la Corte de Justicia designado por el nuevo Gobernador? ¿Cómo valoran esos cambios que se avecinan en Salta?

J.C.C. - Para mí, la credibilidad de esta Corte de Justicia se cayó el día en que confirmaron la condena a cadena perpetua a Santos Clemente Vera, de forma totalmente arbitraria, en una oficina, sin hacer ninguna otra investigación y para ayudar supuestamente al Gobernador a tener dos o tres años más tranquilos, sin tener encima este veneno de asunto de las francesas, sin tener que soportar la presión de un viaje de Bouvier cada cinco o seis meses, con tantas cosas inesperadas que pueden salir en relación con este asunto.

Entonces, ¿qué podemos esperar hoy día? Te voy a hacer una revelación.

La última vez que vi a Gustavo Sáenz fue hace algunos años en la estación Shell de la salida de San Lorenzo, en donde hay un restaurante. No estuvimos solos, pues yo fui con una persona y Sáenz estaba a su vez con otra persona. Es decir, fue una charla con testigos. En aquel momento no tenía ningún mandato; no era ni intendente ni Gobernador. Hablamos de mi libro y de quiénes podrían ser los responsables de manejar este asunto.

Me sorprendió entonces saber que Gustavo Sáenz compartía mi opinión, que valoraba mi investigación tal y como yo la hice, así como las cosas que saqué a la luz para que se investigaran pero que al final no se investigaron.

Gustavo Sáenz, como un ser humano, sin la función, tenía la misma opinión que yo. Tranquilamente me pudo decir en aquel momento que su opinión era diferente, pero sin embargo coincidió conmigo en la apreciación de muchos de los hechos fundamentales.

De aquel encuentro, que se produjo entre el primer juicio oral y su elección como Intendente Municipal de Salta a finales de 2015, he sacado como conclusión que Gustavo Sáenz, como ser humano tiene caridad. Y lo digo sin fijarme en su partido político. Te hablo del hombre.

Lo que corresponde preguntarse ahora es qué puede pasar con Gustavo Sáenz, antes Intendente y ahora Gobernador, con su gran responsabilidad con la Fiscalía y con la Corte. ¿Vamos a tener al Gustavo Sáenz ser humano o vamos a tener a un Gustavo Sáenz nuevo dueño del prostíbulo?

Yo confío en que la razón va a ganar y que Gustavo Sáenz va a cambiar totalmente el destino de esta provincia. Con él, si se anima a revisar los casos que están irresueltos e impunes, vamos a tener una Corte más clara, una Fiscalía más eficiente y vamos a ver brillar la luz de la verdad en tantos casos como el de Luján Peñalva y otros en los que hay bastantes elementos materiales por estudiar. Si ello ocurre, todo se va a resolver y Gustavo Sáenz va a ser el hombre del siglo XXI en la Provincia de Salta.

F.S.P. - Creo que no tenemos demasiadas opciones. Pienso que hay que ser optimistas, como siempre, con todo cambio de gobierno. Hay que darle el beneficio de la duda. Hay que ver cómo recibe Sáenz la Provincia, eso es muy importante también. Yo sé que Gustavo Sáenz ha tenido que pactar mucho para llegar a donde está, como lo tiene que hacer todo político. Entonces no necesariamente se lo mantendría como algo en contra suyo, pero habría que ver cuáles son las medidas que toma una vez que llegue al poder. Como dice Jean-Charles, habría que ver si es el humano o el político hábil calculador. A ver qué cambios toma. De todas formas, ya sabemos que en la Corte ha habido designaciones por parte de Urtubey, y dentro de todo lo que es el Poder Judicial han habido muchos pactos y mucho diálogo para que él se mantenga impune, en sus causas y también en los casos que hay en Salta me imagino yo. Quiero ser optimista, esperemos que se esclarezcan muchas de las situaciones que están pasando en Salta.

J.C.C. - Lo que pasa es que Salta es como una isla también, como mi isla de Córcega. Creo que la verdadera isla es la capital de la Provincia. Todo lo demás, todo lo que pasa fuera, sucede en el enorme territorio en el que impera el famoso narcotráfico. Te diría que hablar tranquilamente, sin presión, sin pauta publicitaria, sin contratos, solamente hablar de una forma normal y natural es fundamental para que las causas judiciales avancen y se resuelvan. En el caso de Luján Peñalva estoy seguro de que hay tantos testigos que saben cosas y que pueden hacer lo mismo que nosotros estamos haciendo en estos momentos, es decir, sentarse y hablar como seres humanos.

F.S.P. - Es importante la visión de Jean-Charles sobre estos asuntos y para nosotros es asombroso la forma en que Salta despierta su atención, pero mirar las cosas desde afuera también es tener una óptica no muy común para ver Salta. Porque el salteño está de alguna forma recluido y aislado del resto del país y uno tiene la tendencia a ensimismarse cuando está en Salta, en donde es relativamente fácil olvidarse o ignorar lo que pasa afuera. Tenemos algo que nos une, sin dudas, pero también poder verlo desde afuera es algo único, porque te salís un poquito de Salta y te empezás a dar cuenta de un par de cosas a las que vos quizá estabas acostumbrado estando ahí, que no son tan normales en el resto del mundo. Eso es un poco lo que nos está pasando y lo que nos une hoy.

J.C.C. - La corrupción existe en todas partes del mundo, pero en sitios como España o Francia no es fácil cambiar un ADN, como sí en cambio es posible en Salta. Creo que tenemos un punto común y es que no estamos afiliados a ningún partido político. Tampoco pertenecemos a una asociación. A mí me encantan las asociaciones pero no pertenezco a ninguna, porque quiero mantener mi independencia. Yo creo que nos importa nuestra independencia por una razón de ética personal. Somos independientes por elección.

F.S.P. - En Salta es imposible no estar ligados de alguna forma a un partido político o a algún tipo de asociación. Por supuesto, podés tener tu opinión, pero no pesa igual.

I.C. - Entre los familiares que luchan contra la impunidad en Salta han surgido, como es sabido, algunas discrepancias. Concretamente quería preguntarle su opinión sobre el proceso judicial instruido para investigar el crimen de Cintia Fernández y las diferencias que han surgido con su madre en el enfoque de ciertas cuestiones.

J.C.C. - Lo primero que debo decir es que toda persona que pierde a un ser querido se merece todo el respeto del mundo, así como su familia. Yo respeto mucho a la persona que ha sufrido una pérdida de esta magnitud, que además ha tenido que padecer que el crimen no se haya resuelto rápidamente. La resolución rápida ayuda a la elaboración del duelo; pero cuando no se resuelve a tiempo, se causa un daño muy intenso a los familiares.

Por tanto, yo respeto mucho a la persona de Ana Fernández, y esto va por delante.

También hay que tener en cuenta que en este asunto se ha producido una mezcla no demasiado feliz, cuando ella después intentó presentarse a una elección con el Partido Obrero. Pienso que la mezcla no ayudó mucho. Muchas veces una persona que tiene una asociación y luego pasa a un proyecto ejecutivo en la política, no consigue los resultados que espera y la persona pierde mucha credibilidad.

Si regresamos al hecho de Ana Fernández, yo creo que ella hizo un trabajo espectacular y muy inteligente con los medios de comunicación. Sin los medios no habría habido resolución. También creo en su sensibilidad y en su aportación sincera a la marcha de los viernes. Pero yo creo que es difícil de hacer una mezcla como la que he señalado, porque el precio que se paga por ella es nada menos que la pérdida de la credibilidad. Ella creó una fundación, yo la vi muchas veces con políticos. Es el ciudadano el que debe opinar.

Y si la pregunta es si ha influido en la sentencia el hecho de que Ana Fernández se haya manejado mucho los viernes con los medios, con escraches y todo eso, no puedo opinar porque no conozco el expediente. Solo conozco lo que ha publicado la prensa y a veces no todo es verdad. La segunda cosa que me parece totalmente increíble y es el punto fundamental para mí (un punto común con el caso de las francesas) es la mentira de parte de la policía. Después, pudo haber habido influencia o no, pero normalmente un trabajo de investigación es cien por ciento limpio. No hay lugar a una sola deriva o a un solo error.

F.S.P. - Dicho sea de paso, va a ser muy importante ver qué decide hacer Gustavo Sáenz con la Policía. Va a ser fundamental.

J.C.C. - No olvidemos una cosa y es que antes de los crímenes de las chicas francesas el CIF ya existía pero no estaba autorizado a funcionar legalmente. La gravedad e importancia del caso de las francesas hizo aflorar la necesidad de investigar bastante y es así que el CIF empieza a trabajar. Pero lo hace de una muy mala manera. Su primer asunto fue uno de los peores, después su ineficiencia se perpetúa y el CIF pierde su credibilidad.

I.C. - Para finalizar, les hago la misma pregunta a los dos. La justicia de Salta es de algún modo una justicia bicéfala: por un lado la Corte de Justicia, con el enorme poder que tiene, y por otro el Ministerio Público Fiscal, que tiene un importantísimo poder de cara a la instrucción de las causas judiciales, el esclarecimiento de los delitos, la acusación pública y el castigo de los culpables. ¿Cómo creen ustedes que se está manejando el Ministerio Fiscal en Salta ahora en relación con estos crímenes irresueltos que conocemos?

J.C.C. - Hablo en base al único expediente actual que yo conozco: el de Luján Peñalva y Yanina Nuesch. En ese expediente sabemos, desde que abrimos la primera hoja, que hay bastantes problemas con los elementos materiales. Yo hablo de elementos materiales, no de los rumores, que es el gran deporte que se practica en Salta. Estos elementos existen y se encuentran sellados. Hay enormes problemas con ellos y ver a la Fiscalía, enfrentada a este tipo de elementos materiales, reaccionar hoy día de una forma tan lenta, me parece muy sospechoso.

Otra cosa también es el trabajo mal hecho voluntariamente. Porque no imaginamos que son idiotas. Estamos en un país del G20 y los argentinos se manejan en todo el mundo para enseñar. Hay policías y científicos argentinos que aprenden y enseñan en otros países de Europa o los EEUU y que tienen perfecto conocimiento de su trabajo. No hay posibilidad de decir que estamos en un pequeño país del África en donde se han hecho mal las cosas por falta de conocimiento y se ha preservado mal una escena del crimen.

Lo vemos muy bien en el asunto de Luján y de Yanina, en el que se han hecho cosas muy mal de forma intencionada, como tocar la cuerda, que es el punto fundamental. Es como el día en el que en el juicio de las francesas se presenta la famosa escopeta del padre de Gustavo Lasi y un policía se planta ante el tribunal con el arma en la mano sin guantes y exhibe ante la jurisdicción el elemento del crimen. El más fundamental de todos ellos, sin precaución.

En relación con el trabajo de la Fiscalía, yo solo puedo hablar de lo que conozco, y puedo decir sin temor a equivocarme que los fiscales de Salta actúan siempre como representantes del poder político que maneja el Gobernador de Salta.

En el caso de Luján Peñalva vemos una reconstrucción de los hechos, pero si hablamos de tanta prueba, ¿por qué Marisa Peñalva necesita hacer todo eso, pagar con su dinero y gastar su energía en los Estados Unidos? No es normal. No es normal que un fiscal de Salta dependa de un investigador de los Estados Unidos, como tampoco lo es que dependan de un investigador de Francia, como en el caso de la pericia genética de las francesas.

El segundo punto que yo veo es la falta de investigación de los elementos materiales. ¿Por qué no se investigan, existiendo la posibilidad técnica de hacerlo? ¿Por qué la Fiscalía eventualmente puede ayudar a que viajen las prendas y algunos otros elementos materiales, pero no con los gastos de la familia Peñalva? ¿Por qué?

Y una tercera cosa que no me gustaría pasar por alto. Vemos que hay un gran problema con la Policía, que es fundamentalmente mentirosa, pero es toda una cadena. En Francia se dice fusible. La Fiscalía debe investigar toda la cadena pero no lo hicieron. Porque si investigaran podríamos encontrar el camino de la verdad de otra manera. Por eso que esta Fiscalía en estos momentos me parece que lo único que está haciendo es perseverar en el error y seguir el mal camino.

F.S.P. - Yo creo que más que ser obsecuentes o no saber hacer las cosas, yo creo que utilizan la táctica de no hacer mucho. En el caso nuestro, a más de siete años del hecho, todavía estamos con la investigación que hizo la familia. Tenemos por supuesto los rastrillajes iniciales que hizo la Policía, pero de los fiscales poco o nada.

J.C.C. - Si me permites opinar, toda la investigación se tuerce el día en que Urtubey dijo que fue un suicidio. Es decir, todo viene mal desde es primer día.

La conversación entre Jean-Charles Chatard, Facundo Singh Peñalva e Iruya.com concluye con un abrazo y el compromiso de seguir más de cerca aún, si cabe, los acontecimientos y la realidad de la Provincia de Salta, en un momento tan especial como el que supone el cambio de ciclo político. Este compromiso conlleva también la promesa de aportar desinteresamente, sin interés ni afiliación partidista, desde el pluralismo de opinión y la tolerancia, al progreso y al mejoramiento de las instituciones fundamentales de una provincia injustamente postergada.