Día Mundial contra la Pena de Muerte: Pobreza y justicia

  • Las desigualdades sociales y económicas impiden el acceso a la justicia de los condenados a muerte.
  • Discriminación

Este 10 de octubre, el 15° Día Mundial contra la Pena de Muerte tiene por objeto sensibilizar sobre las razones por las cuales las personas que viven en la pobreza corren un mayor riesgo de ser condenadas a muerte y ejecutadas.


El Día Mundial contra la Pena de Muerte está impulsado por una coalición internacional que se opone a esta medida.

A partir de los años ochenta, ha surgido una dinámica general en favor de la abolición de la pena de muerte que ha sido constante hasta hoy. Según Amnistía Internacional, en 1977 sólo 16 países habían abolido la pena de muerte para todos los delitos. En la actualidad, dos tercios de los países del mundo (141) son abolicionistas en la legislación o en la práctica.

Sin embargo, el uso constante del uso de la pena de muerte está inextricablemente ligado a la pobreza. Las desigualdades sociales y económicas impiden el acceso a la justicia de los condenados a muerte por varias razones: los acusados en tal situación de desigualdad pueden carecer de recursos (sociales, económicos y relaciones políticas) para defenderse a sí mismos y serán marginado por su condición social.

En este sentido, la pena de muerte es una práctica discriminatoria, a menudo utilizada en contra de los pobres y por ende debe ser abolida.

{articles tags="current" limit="3"}
  • {Antetitulo}
    {link}{title limit="58"}{/link}
    {created} - {cat_name} - {created_by_alias}
{/articles}