
Para ello, se han activado mecanismos que faciliten el inteercambio de información sobre problemas de salud que pudieran surgir durante el campeonato deportivo.
El objetivo es detectar con rapidez brotes de enfermedades que pudieran tener un impacto en la región y a nivel global, con el fin de que las autoridades sanitarias nacionales puedan poner en marcha y a tiempo las medidas que se requieran, reduciendo así sus efectos.
La OPS resaltó que, como los partidos tendrán lugar en diferentes ciudades brasileñas, esto provocará un incremento de viajes internacionales y una mayor presión para los servicios locales de salud ante la grana fluencia de gente de todo el mundo.
Finalmente, el organismo alertó que esa situación abre la posibilidad de importar y exportar enfermedades infecciosas por lo que la detección temprana resulta esencial.
Fuente: Organización de las Naciones Unidas.