La jueza María del Milagro López, integrante de la Sala V del Tribunal de Juicio, ha condenado a Rubén Adalberto Sosa a la pena de dos años de prisión de ejecución condicional por resultar autor material y penalmente responsable del delito de abigeato agravado.
La magistrada ha impuesto al condenado las siguientes reglas de conducta: fijar domicilio y comunicar cualquier cambio al Tribunal en un plazo de cinco días hábiles; no consumir estupefacientes ni abusar del consumo de bebidas alcohólicas; concurrir al Tribunal las veces que sea requerida su presencia.
Sosa fue sorprendido por la Policía cuando circulaba por la calle Entre Ríos en una motocicleta en compañía de otra persona, alrededor de las 23.30 horas. Según la información oficial, el agente notó "la actitud sospechosa" de los motociclistas y advirtió que uno de ellos llevaba una campera de jean manchada con sangre. Luego observó que detrás venía otra moto con dos personas quienes llevaban una bolsa de arpillera con manchas de sangre. Al advertir la presencia policial se dieron a la fuga y, tras una larga persecución, Rubén Adalberto Sosa fue detenido y no supo explicar la procedencia del cerdo que llevaban en la bolsa.
La Policía había recibido en la comisaría de la zona denuncias por robo de ganado porcino en fincas cercanas.
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