
Según informa el portavoz de prensa del Poder Judicial salteño, al acabar la audiencia, el juez Teseyra correr vista al Ministerio Público Fiscal, para que se expida respecto a la procedencia o no de la pretensión de amparo.
Como se recordará, el representante procesal del Arzobispado se opuso a suspender la demolición, por cuanto la Iglesia tiene un proyecto para construir en el lugar un nuevo templo. El Arzobispo en persona le llevó al juez Teseyra el proyecto, durante una diligencia de inspección ocular que se concretó la semana pasada.
Los vecinos que se dicen afectados alegan entre otras razones que la iglesia de San Francisco Solano, cuya construcción data de la segunda mitad del siglo XIX, fue declarada en el año 2005 de interés municipal, lo cual no supone, de buenas a primeras, que el poder de decisión sobre su futuro se traslade de la Iglesia a la Municipalidad.
Fuente: Poder Judicial de Salta