
El presidente Alberto Fernández ha presentado ayer el proyecto de ley de reforma de la justicia, que prevé la unificación y duplicación de los juzgados federales y la designación de un consejo de expertos para que asesore al Poder Ejecutivo sobre el funcionamiento del sistema. El Presidente ha dicho que se propone "consolidar una justicia independiente".
El Presidente ha anticipado que el proyecto contempla la creación de 23 nuevos tribunales para mejorar la función judicial del Estado.
El Jefe de Estado ha expuesto en la Casa de Gobierno los alcances del proyecto que enviará al Congreso de la Nación. Lo hiz, acompañado por el Jefe de Gabinete, Santiago Cafiero; la Ministra de Justicia y Derechos Humanos, Marcela Losardo, e integrantes del Consejo Consultivo.
El Presidente ha dichi que "la defensa del derecho reclama como indispensable que el sistema se adecue a la norma" y que "el Poder Judicial deba estar en manos dignas, no permeables a ninguna presión".
En el acto de presentación han estado la vicepresidenta de la Corte Suprema de Justicia, Elena Highton de Nolasco; rectores de universidades y legisladores nacionales. Durante su transcurso, el primer mandatario ha repasado las intromisiones de la política en la justicia a lo largo de la historia argentina.
En ese sentido ha destacado que la iniciativa propone "organizar y mejor la justicia federal" y que "el poder decisorio no se concentre en poco magistrados", porque eso fue lo que llevó a que ese fuero "se politizara", los procesos "no se desarrollaran con eficacia" y se "manipularan los tiempos en función del clima político imperante".
El Jefe de Estado ha destacado la necesidad de una reforma judicial para que nunca más exista una política que judicializa los disensos, y aseguró que sin un sistema de justicia "independiente del poder político, no hay república y democracia.
Asimismo, expresó que el proyecto propone, entre otras cuestiones, un fortalecimiento de la justicia federal con la creación de juzgados en las provincias y una especialización por materia.
Al explicar los alcances de la propuesta, advirtió que será causa grave de mal desempeño de sus funciones, más allá de las sanciones administrativas o penales que reciban, que los magistrados no cumplan con las reglas que dispone el proyecto de reforma judicial, entre las que se cuentan que todas las personas reciban trato igualitario y que eviten valerse del cargo para defender intereses privados.
En otra parte de su exposición, el Presidente ha dicho que durante el gobierno de Mauricio Macri la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) "quedó en un manto de sospecha" por intervenir en causas judiciales y "el principio de inocencia en juicio se vulneró".
"Lo que estamos proponiendo es consolidar una justicia independiente", destacó, y dijo que se busca "que desarrolle los procesos con celeridad y eficiencia".
El proyecto, precisó Fernández, "también propone el fortalecimiento de la justicia en el interior del país".