La demagogia del agua

  • El Gobernador de Salta y candidato a Vicepresidente de la Nación, Juan Manuel Urtubey, ha presentado ayer en un escenario digno de un concierto de rock un nuevo programa gubernamental cuyo eje es la exención del pago del agua a unos 28 mil usuarios.
  • Anuncio del gobierno

Aunque el nuevo programa ha sido presentado como una herramienta para hacer más eficiente el uso del recurso, el hecho de que su anuncio público fuera realizado por Urtubey -candidato a Vicepresidente de la Argentina- y por Lucio Paz Posse, candidato a Gobernador de Salta, hace sospechar que se trata de un gesto diseñado para servir a la campaña electoral de ambos.


Si bien los detalles más pequeños del plan no se conocen en profundidad, el anuncio central del gobierno ha sido que unos 112 salteños (esto es, una cantidad estimada en 27.539 hogares) tendrán agua gratis, con la sola condición de que su consumo no exceda los 12.500 litros mensuales.

Esto quiere decir que aquellos salteños que pueden pagar su consumo de agua, aunque este sea inferior a los 12.500 litros mensuales, tendrán el agua gratis, exactamente lo mismo que aquellos que a los que les falta el dinero para poder pagarla.

Es decir, la medida del gobierno, que toma en cuenta solo el consumo de los hogares y no su renta, es profundamente injusta, puesto que reciben igual tratamiento quienes pueden pagar el agua y quienes no pueden pagarla.

Por otro lado, decir que los usuarios recibirán en agosto una boleta con costo cero es irresponsable y demagógico, puesto que proporcionar agua corriente a los hogares siempre tiene un costo. Lo que correspondía era decir a precio cero, pues al menos esta expresión no deja flotando la idea de que el agua no cuesta al conjunto de los salteños.

La medida, además, es una simple decisión del gobierno -y, por tanto, revocable- y no un derecho recogido y reconocido en una Ley de la Provincia.

Como ya ha sucedido con otra medida demagógica, como la del boleto estudiantil gratuito, es de suponer que, ni bien pasen las elecciones, la del agua gratis estará también rodeada de trampas y de excepciones, que harán que el control de los excesos y abusos de los usuarios sea más caro todavía que el tenerles que subvencionar el agua a pobres y ricos por igual.