Un votante roba en Orán un celular que encontró cargando dentro de un cuarto oscuro

Una mujer que se desempeñaba como fiscal en una escuela ubicada en las calles Belgrano y Fassio de la ciudad de Orán denunció al policía que montaba guardia en el exterior del establecimiento el robo de su teléfono celular. El aparato se encontraba cargando dentro del cuarto oscuro, en donde permanecía enchufado.

El uniformado identificó rápidamente al autor de la sustracción como el joven que momentos antes había entrado al cuarto oscuro y lo detuvo, enviándolo a la Comisaría.

No se trató de un delito electoral, precisamente, pero se debate si no pudo cometer una falta de esta naturaleza la fiscal que dejó el teléfono cargando, por abuso de cuarto oscuro.

Salvo que la Policía hubiera hallado el celular robado en poder del votante, cualquier otra evidencia en su contra (presunciones, testigos, etc.) podría conducir a una violación de sus derechos electorales y, en concreto, del secreto del voto.

Lo que la Policía no ha logrado establecer es si la fiscal dueña del teléfono no lo dejó allí con la cámara activada, con objeto de espiar a los votantes o prevenir el robo o la destrucción de votos.

Me llevo la urna

Otro suceso curioso ocurrió también en Orán, en una escuela ubicada en el barrio 20 de febrero. Según un informe de la Policía de Salta, una mujer que se hallaba sentada en una mesa electoral se llevó la urna al cuarto oscuro, con el argumento de que «se le volaron los votos».

De acuerdo con el relato policial, al hacerlo la mujer dejó la puerta del cuarto oscuro entreabierta, por lo que el agente de consigna pudo observar que la mujer metió la mano entre sus refajos y extrajo de su cintura un sobre que metió a la urna, antes de salir del cuarto oscuro y sentarse nuevamente.

Al pedirle el agente explicaciones, la mujer dijo que había votado en cuenta de su hermana, que se encuentra de viaje, aunque no explicó muy claramente por qué motivo ella se llevó la urna también «de viaje», cuando ello no está permitido.

El policía dio aviso inmediato a la delegada de zona, efectuándose -dice el parte oficial- el «reemplazo inmediato». Lo que no se sabe es si se reemplazó la urna o a la mujer, cuya responsabilidad en la mesa no fue divulgada por la Policía.