La Selección Argentina se ha impuesto esta noche a la de Bosnia Herzegovina por un marcador de 2 a 1, en el encuentro inaugural del Grupo F del Mundial de Fútbol, que se disputó en el estadio Maracaná de Río de Janeiro. El equipo nacional se vio prontamente en ventaja cuando a los dos minutos del primer tiempo un centro de Messi rozó la cabeza de Marcos Rojo y posteriormente la rodilla de un jugador bosnio y se introdujo en el arco rival.
A partir de ese momento las acciones del partido fueron ampliamente favorables al seleccionado bosnio, que controló la pelota y generó alguna ocasión de gol mediante el juego aéreo.
Messi, que había conducido el ataque argentino en el primer cuarto de hora, desapareció del partido, igual que el resto de los atacantes.
La sensación de dominio bosnio se fue haciendo más intensa aún hacia el final del primer tiempo, cuando la defensa argentina, aun sin pasar serios apuros, se mostraba incapaz de arrebatar el balón al seleccionado balcánico.
En la segunda parte, Sabella modificó su estrategia al dar entrada a Fernando Gago en lugar de Hugo Campagnaro y a Gonzalo Higuaín en reemplazo de Maxi Rodríguez, que poco había aportado al medio campo.
Los cambios dieron mayor fluidez al equipo nacional y un mayor protagonismo a Messi, muy bien secundado por Gago. En una doble pared con Higuaín, Messi se llevó una pelota a toda velocidad esquivando las marcas rivales, y tras dejar a dos defensores bosnios tendidos en el la puerta del área sacó un potente remate esquinado que tocó el palo derecho del arquero y traspuso la línea de gol.
El tanto trajo alivio al equipo argentino, que controló mejor las marcas y lanzó ataques más precisos. Sin embargo, cuando el partido parecía encarrilado con una victoria segura por 2-0, vino el gol de Bosnia en una jugada en la que falló el arquero Romero, que, hasta aquí, había tenido un desempeño intachable.
En los minutos finales Bosnia intentó irse arriba, pero entre el cansancio de sus jugadores y el acierto de la defensa argentina impidieron que el marcador se modificara.
Al final, un complicado debut para la Argentina frente a un rival correoso que le arrebató la pelota y le impidió desarrollar su juego.