Evo Morales dimite como presidente de Bolivia ante la gravedad de la crisis

  • El presidente boliviano ha anunciado que ha enviado su renuncia a la Asamblea Legislativa. La dimisión de Morales, que gobernaba es país desde 2006, se produce en medio de una profunda crisis política y social. También ha renunciado el vicepresidente Álvaro García Linera.
  • Denuncias de golpe de Estado

Al tiempo de formular el anuncio, tanto Morales como García Linera han denunciado que su dimisión fue obligada y obedece a un golpe de Estado.


Hace algunas horas, Morales había tomado la decisión de convocar a unas nuevas elecciones, después de conocerse que la auditoría electoral de la OEA había detectado graves irregularidades que invalidaban su reelección en primer vuelta. Sin embargo, la decisión de dimitir ha llegado después de que las fuerzas armadas del país y la Policía le reclamaran públicamente la renuncia.

Tras conocerse la noticia, el gobierno del presidente argentino Mauricio Macri se ha visto obligado a salir a aclarar que no ha ofrecido a Morales asilo político en territorio argentino.

En un mensaje televisado, Morales dijo que renunciaba a su cargo para que Mesa y Camacho (sus principales opositores) «no sigan persiguiendo a los dirigentes sociales».

Por su parte, el ahora exvicepresidente del país, García Linera, junto a Morales, ha dicho: «No queremos que estos grupos violentos quieran ensangrentar más al pueblo. Han desconocido estos grupos el orden constitucional. El Golpe de Estado se ha consumado. Fuerzas oscuras han destruido la democracia».

Morales, de 60 años y en el poder desde 2006, había ganado la reelección en las cuestionadas elecciones de octubre, pero la misión de auditoría de la OEA detectó numerosas irregularidades, en un informe divulgado este domingo. En las horas siguientes, Morales perdió el apoyo de las fuerzas armadas y de la Policía, mientras miles de personas exigían su renuncia en las calles.

El presidente saliente ha prometido también en su mensaje televisado continuar con el combate. «Los humildes, los pobres, los sectores sociales vamos a continuar con esta lucha por la igualdad y la paz. Es importante decirle al pueblo que es mi obligación como presidente buscar esta pacificación».

Los acontecimientos se precipitaron en Bolivia cuando la máxima autoridad del ejército, general Williams Kaliman, anunció que las fuerzas armadas pedían a Morales la renuncia a su mandato presidencial, para permitir «la pacificación y el mantenimiento de la estabilidad, por el bien de nuestra Bolivia».

Las reacciones internacionales no se hicieron esperar. Entre las primeras repercusiones, Cuba expresó el domingo su "enérgica condena" al "golpe de Estado" en Bolivia y se solidarizó con Evo Morales. "Nuestra solidaridad con el hermano presidente Evo, protagonista y símbolo de la reivindicación de los pueblos originarios de Nuestra América. Llamamos a la movilización mundial por la vida y la libertad de Evo", dijo en Twitter el canciller cubano, Bruno Rodríguez.

También hubo condenas por parte de Nicolás Maduro y Lula Da Silva. El recientemente liberado expresidente del Brasil, dijo: "Acabo de saber que hubo un golpe de Estado en Bolivia y que el compañero Evo fue obligado a renunciar. Es lamentable que América Latina tenga una elite económica que no sepa convivir con la democracia y con la inclusión social de los más pobres".

Mientras tanto, el presidente venezolano dijo: “Condenamos categóricamente el golpe de Estado consumado contra el hermano presidente @evoespueblo. Los movimientos sociales y políticos del mundo nos declaramos en movilización para exigir la preservación de la vida de los pueblos originarios bolivianos víctimas del racismo”.

Fuente: Clarín