
El estudio pone de manifiesto el avance del PSOE, que se recupera y vuelve a la segunda posición que le había arrebatado Unidos Podemos. El partido liderado por el chavista Pablo Iglesias pierde 2 puntos desde su último congreso (19,7%), mientras que Ciudadanos, la fuerza política centrista que lidera Albert Rivera, se consolida como la cuarta fuerza con el 14,9% de intención de voto.
Se estabiliza el PSOE
La recuperación del PSOE coincide con el anuncio de la presidenta de la Comunidad Autónoma de Andalucía, señora Susana Díaz, de presentar su candidatura a la secretaría general del partido, en un proceso de primarias que culminará este mes de mayo y en el que tiene como contrincantes al madrileño Pedro Sánchez y al exlehendakari vasco Patxi López.La fotografía que ofrece el barómetro del CIS correspondiente al mes de abril y muestra a un PP que, a pesar del retroceso, mantiene una cómoda ventaja de más de 11 puntos respecto de la segunda fuerza y que no acusa un gran desgaste, pese a la corrupción (el sondeo es anterior al estallido del caso Lezo), desde las elecciones del pasado 26 de junio.
El Partido Socialista Obrero Español se encuentra dirigido actualmente por una «gestora», una dirección transicional a la espera de un proceso interno, que parece haber conseguido rescatar al histórico partido de la izquierda, que tocó fondo el pasado mes de noviembre con un 17% de intención de voto. Desde entonces, los dos barómetros posteriores han cambiado la tendencia descendente del PSOE: en el de abril, publicado ayer, el partido gana 1,3 puntos respecto al de enero, cuando ya había mejorado 1,6 puntos respecto al barómetro anterior.
Retroceso de Podemos
El avance del PSOE contrasta nítidamente con el retroceso de Unidos Podemos. La coalición que forman el partido de Pablo Iglesias más Izquierda Unida y el resto de alianzas territoriales retrocede dos puntos de intención de voto respecto del último barómetro de enero. Aunque la lucha por la segunda posición sigue sin estar resuelta —el PSOE se coloca por delante en este barómetro pero a solo dos décimas de distancia de Unidos Podemos, y el margen de error de la encuesta es de dos puntos—, lo que sí indica el estudio es una tendencia descendente en el caso de Unidos Podemos.La coalición se deja dos puntos exactos en el primer barómetro que mide su intención de voto desde el congreso de Vistalegre 2, en el que Pablo Iglesias se impuso a su ex número dos, Íñigo Errejón, y este y su corriente fueron apartados. En el estudio de enero la formación perdió apenas una décima, pero lo llamativo es que la coalición no haya rentabilizado la crisis de los socialistas. Las dos formaciones se reparten hoy casi a la mitad el electorado progresista, y si los resultados del CIS fueran los de las elecciones, cualquier gobierno alternativo al PP tendría que pasar por un acuerdo entre ambas fuerzas.
El último barómetro no recoge sin embargo el efecto que sobre la opinión pública tiene la propuesta de Unidos Podemos de presentar una moción de censura contra el actual gobierno del PP, un gesto que ha profundizado el aislamiento de la formación chavista en el juego parlamentario.
El estudio de abril tampoco recoge el efecto del llamado caso Lezo, un escándalo de corrupción que afecta gravemente al PP de Madrid y que ha supuesto la entrada en prisión del expresidente de la Comunidad de Madrid Ignacio González.
Ciudadanos y las notas de los políticos
En paralelo, Ciudadanos, que forzó la dimisión del presidente murciano tras retirarle su apoyo y unirse a la moción de censura del PSOE, experimenta una subida de dos puntos y medio. Desde las elecciones ha ganado casi dos puntos.A pesar de la holgada ventaja del PP respecto de sus competidores, el Gobierno no obtiene una buena valoración de los ciudadanos. Un 53,1% considera que la gestión del Ejecutivo es mala o muy mala, un 32,5%, que es regular y solo un 12,2% la valora como buena o muy buena. Tampoco ninguno de los ministros del Gobierno de Mariano Rajoy aprueba en valoración. Entre los miembros del Ejecutivo, la que más gusta es la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría (3,79 puntos).
Mariano Rajoy empeora su nota, con 2,91 puntos frente a los 3,10 de enero, pero tampoco aprueban sus rivales (Javier Fernández, presidente de la gestora del PSOE, logra un 4,12; Pablo Iglesias, un 3, y Albert Rivera, un 3,68). Ni siquiera lo hace el político mejor valorado, Joan Baldoví, de Compromís, con un 4,54.
Fuente: El País