Mientras el gobierno turco ha reconocido esta noche el alzamiento de una parte del ejército, un comunicado leído por los militares en la televisión dice que el país está bajo el control del ejército y que han sido cerrados los puentes en Estambul, la principal ciudad del país. El primer ministro turco, Binali Yildirim, ha reconocido también que los militares sublevados han rodeado algunos edificios importantes, pero ha desmentido implícitamente que el gobierno del presidente Erdogan haya perdido el control del país.
Otras fuentes cercanas al gobierno hablan de que el jefe del Estado Mayor del ejército, supuestamente leal a los mandos gubernamentales, ha sido tomado como rehén de los golpistas en un cuartel militar de Ankara. En esta ciudad -capital del país- se han escuchado disparos, según algunos testigos. Los incidentes se habrían producido en el cuartel central del Estado Mayor.
Según informa la cadena de noticias N-TV, unidades de la Gendarmería han cerrado dos puentes sobre el Bósforo en Estambul, impidiendo así la circulación desde la parte asiática hacia la europea de la ciudad.
Otras informaciones refieren que se han visto tanques apostados cerca del aeropuerto de Atatürk, que fue objeto de un reciente atentado islamista. Según la televisión turca TRT, todos los aeropuertos del país se encuentran cerrados.