
La cifra es mucho más alentadora de lo que muchos economistas habían previstos y señala el regreso del país al nivel de desempleo anterior a la crisis financiera.
La contratación se mantiene robusta: 223.000 nuevos empleos se han creado en junio, aunque algunos estudios proyectaban una cifra cercana a los 235.000.
La queja generalizada es que el aumento de los puestos de trabajo y la reducción del desempleo no se traduce, por el momento, en aumento de los salarios. La retribución horaria promedio ha aumentado solo el 2% en términos anuales en el mes de junio, todavía muy por debajo del mínimo de 3,5% requerido para una economía saludable.
También hay preocupación en torno a la tasa de actividad, que ha rozado en junio sus mínimos de 37 años. Esto significa que muchas personas no están buscando empleo o se han dado por vencidas en su búsqueda.
Fuente: CNN