
Productores vitivinícolas alertaron sobre la posibilidad de que se dificulte la cosecha de uvas para la producción de vino y aseguraron que el sobrestock de ese producto presiona sobre los precios en 'un mercado recesivo'.
El presidente de la Corporación Vitivinicola Argentina (Coviar), Ángel Leotta, advirtió que 'a pesar de que la nueva cosecha viene normal (25 millones de quintales), hay una serie de factores que afectan mucho al sector: uno es el sobrestock vínico y otro es que el mercado interno y el consumo vienen cayendo cada vez más, porque el poder adquisitivo y el salario cayó'.
Según datos del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), las ventas en el mercado interno se redujeron 6,3% en 2018 respecto a 2017 hasta los 8.358.345 hectolitros, mientras que el consumo per cápita se redujo en un 7,73% hasta los 27,81 litros, calculados en una población mayor de 20 años.
'De esta industria depende mucha gente, tanto directa como indirectamente. Si no hay soluciones perentorias va haber un problema social gravísimo en la región. Hoy peligra la realización normal de la cosecha y pueden quedar colgadas las uvas y que se arruinen los parrales', indicó.